Cataluña

Disney se suelta la melena

Los cuatro parecen tipos estupendos. Afables, muy norteamericanos (menos uno), y todos acaban confesando que su vida es la animación. Porque Jesús Canal, supervisor de personajes, nació en Cataluña aunque lleva en EE UU 15 años trabajando.

 
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Canal explica cuánto hizo por «Enredados»: «Mi trabajo abarcó el vestuario, los colores, la creación del cabello... El mayor reto de la cinta, una nueva versión del cuento protagonizado por Rapunzel, fue animar la melena que luce y mide 21 metros. Y el segundo, elevar en Disney el nivel de la animación (clásica y digitalizada). Ya hemos visto lo que Pixar puede hacer; pues aquí pretendimos ir un paso más allá». Lo de la cabellera no fue broma: «Está formada por 100.000 pelos, era un proceso caro...

Los estudios no quieren gastarse demasiado en asuntos como éste, aunque yo dije que tendrían que desarrollar un programa informático especial para lograrlo». Rodada en 3D, aclara, sin embargo, que «al principio te asombraba verlo, el problema comenzó cuando cualquier cosa se salía de la pantalla sin venir a cuento... De ahí que lo usemos en momentos precisos del filme».

Reconoce asimismo que «en Disney tienen las ideas claras, de ahí que John Lasseter le haya dado el poder a los directores». Y desmonta una leyenda: «La colaboración entre Disney y Pixar es grande, aunque ya no me acuerdo quién compró a quién... No hay envidias, a lo mejor algo, porque los humanos somos así, pero no se ve en la superficie».

Keane, dibujante bestial

Cede Canal su asiento al veterano dibujante Glen Keane, uno de los mayores artífices del filme. Rapunzel posee hasta rasgos de su hija: «Fue un camino largo que arrancó en 1996; fue el primer reto, seguir con una idea tanto tiempo... Y luego estaba el ordenador. No obstante, hay escenas que parecen realizadas por mí directamente». Le pregunto por qué un título de animación, el género que más ha evolucionado los últimos tiempos, no ha conseguido aún el Oscar a la mejor película. «Ratatouille», por ejemplo. O, esta edición, «Toy Story 3». Y en los ojos de Keane brilla un poco la tristeza: «El año que nominaron a "La Bella y la Bestia"alguien afirmó que no se debía dar la estatuilla a una donde el actor no era real ... Fui el creador de la Bestia, recuerdo cuánta emoción puse. Me considero un intérprete con lápiz, lo que la Academia no tiene en cuenta. Se nos ve a veces incluso como una amenaza. Siempre que surge algo novedoso la gente reacciona con temor». Y no duda sobre hacia dónde debe encaminar sus pasos los estudios: «Al principio intentaba copiar a Pixar, y era frustrante, porque tienen distintas personalidades. Ahora, tras 8 años perdidos, nos hemos reencontrado al fin con nuestra identidad, el cuento de hadas. Y lo hemos conseguido con "Enredados"».

También viajaron a Madrid los dos jóvenes directores de la cinta. Uno se llama Byron Howard, autor de «Bolt»: «El 3D ayuda a luchar contra la piratería, sin duda, aunque debe contribuir a la historia, no producir dolor de cabeza...». Y el otro, Nathan Greno, responde a una pregunta sobre la parte musical de la cinta, tan importante siempre para Disney: «No queríamos que fuera un musical de Broadway.. Para inspirarnos revisamos clásicos de la casa como "La dama y el vagabundo"». Mientras, Howard insiste en que a los niños de hoy «los grandes títulos de la factoría les siguen gustando. Ahora ellos son más sofisticados porque tienen internet, la consola... Pero no haremos nunca un filme tonto para el público infantil». Y, antes de marchar, un consejo de Greno: «Disney debe evitar encasillarse y repetir fórmulas. Eso empobrece la calidad de las películas, porque llega un momento en que sólo es una fotocopia de otra fotocopia». O futiles segundas y terceras entregas.