Motociclismo

Tokio

Guerra radiactiva

Los pilotos firman una carta expresando su deseo de no ir a Japón. La FIM dice que la carrera se disputará

«Creo que a nadie en el "paddock"le hace gracia tener que viajar este año a Japón», aseguró ayer Lorenzo en Mugello
«Creo que a nadie en el "paddock"le hace gracia tener que viajar este año a Japón», aseguró ayer Lorenzo en Mugellolarazon

El Ministerio de Asuntos Exteriores español asegura en su página web que «viajar a Tokio no supone actualmente ningún riesgo sanitario», pero sí mantiene la recomendación «de no permanecer en un área de 80 kilómetros en torno a la central nuclear de Fukushima». El circuito de Motegi no está mucho más lejos de la fuente de radiación y por eso los pilotos de MotoGP siguen insistiendo, unos más vehementemente que otros, en que no quieren que el Gran Premio de Japón se dispute este curso: «No puedo asegurarte al cien por cien que no vaya a ir, porque igual en el último momento voy, pero no me hace nada de gracia. Creo que a nadie en el "paddock"le hace gracia, incluso a los que no han firmado el papel», decía ayer Lorenzo, el más implicado en la causa de no viajar al escenario del terremoto. Cuando habla de «el papel» se refiere a una carta que han firmado todos los participantes en la categoría reina (excepto el japonés Aoyama) en la que expresan a los organizadores su deseo de no ser obligados a desplazarse hasta Motegi en el mes de octubre, la nueva fecha en la que se fijó esta cita tras ser aplazada en abril.

Valentino Rossi y Simoncelli confirmaron la existencia del documento, Stoner y Ben Spies prefirieron no hablar del asunto, y Dani Pedrosa reconocía que el escrito no era una negativa sino sólo el anuncio de que preferían no tener que ir. «No sé qué pasará, nadie sabe si se disputará la carrera con todos, con un solo piloto (Aoyama) o con él y otros pilotos invitados por las marcas», insistía Lorenzo, desde el principio empeñado en no correr en Oriente: «Soy joven y no quiero arriesgarme inútilmente», afirmaba no hace muchas semanas respecto a su temor a someterse a los efectos de la radiación.

Hasta ahora, la idea de casi todos los que forman parte de la caravana del Mundial es que tarde o temprano la prueba se cancelaría, pero de eso nada. La Federación Internacional (FIM) tiene previsto anunciar hoy que la carrera sigue en pie, tal y como corroboró ayer en Mugello Carmelo Ezpeleta, presidente de Dorna: «La Organización Mundial de la Salud y la Agencia Internacional de la Energía Atómica dicen que no hay riesgo, así que el gran premio se confirma. Tengo todo el respeto por los que no quieran ir, pero no es mi problema». Los organizadores han encargado a una compañía italiana el estudio de los niveles de radiactividad en el circuito y en la comida de las zonas por las que pasarían los participantes; si los resultados son normales, el público japonés tendrá este año su carrera.