El salto más corto de la historia

Con una trayectoria de 39.068 metros de altura, la proeza del austriaco Félix Baumgartner fue catalogada el pasado domingo como «el salto infinito». Un reto que, según los datos de «Google», fue vivido en directo a través de «YouTube» por casi ocho millones de personas, la mayor audiencia de Internet para una transmisión en vivo.

El sponsor principal de la machada ha conseguido, en términos de repercusión mediática, una hazaña igual o mayor que la del propio Baumgartner. Sin embargo, bajo la estela de las redes sociales, no han faltado ya las bromas y parodias a una gesta que ha roto tres récords mundiales.

Entre los chistes y comentarios especulando lo que debió pensar el austriaco durante el salto, ha destacado la parodia en un programa de televisión estadounidense en que se ha imitado a Baumgartner aunque no desde la misma distancia, precisamente.

Alex Brenner, con el patrocinio de la marca de carne «Slim Jim», se presentó en el show de TV «Conan» que se emite por el canal estadounidense «TBS» para protagonizar otra caída libre histórica desde una altura de diez centímetros.

Para completar la parodia a la repercusión mediática que obtuvo el salto de los 39.068 metros, el «salto más corto de la historia» fue seguido en vivo dentro del estudio de televisión por su compañero de cuarto y su perro.

La escena concluyó con un médico constatando que Brenner había pagado la «proeza» con su propia vida.

Un récord del marketing
El salto de Félix Baumgartner se ha repetido a lo largo de los días en tantas portadas de periódicos y páginas web que ya ha dado pie a la fórmula: «Un pequeño paso para un hombre, pero un gran salto para el marketing de las bebidas energéticas», según lo expresó un internauta en la red social «Twitter».

Más de medio millón fans en «Facebook» han dado un espaldarazo gigantesco en términos de marketing a «Red Bull» frente a su competencia.