Fray Ejemplo

Hace muchos años que conozco a Cristóbal Montoro y sigo pensando que es un magnífico y preparado profesional y una mejor persona todavía. Por lo que creo que las medidas adoptadas hasta ahora por él van a ser positivas para sus dos obsesiones políticas: crear empleo y controlar el déficit. Pero echo en falta, como otros muchos españoles, medidas que atañan también al sacrificio de la clase política española. Lleva circulando estos días por internet un texto que voy a tratar de reflejar hoy en mi columna como una petición, aunque tardía, a SS MM los Reyes Magos. El mensaje, que me ha llegado ya por tres vías distintas (mi amigo Luisma, mi suegro y mi padre putativo), pide una Ley de Reforma del Congreso de 2011 (enmienda de la Constitución de España) con las siguientes puntualizaciones: 1. El diputado será asalariado solamente durante su mandato. Y no tendrá jubilación proveniente solamente por el mandato. 2. El diputado contribuirá a la Seguridad Social, por lo que el fondo de jubilación del Congreso pasará al régimen vigente de la Seguridad Social. El diputado participará de los beneficios dentro del régimen de la Seguridad Social exactamente como todos los demás ciudadanos. El fondo de jubilación no puede ser usado para ninguna otra finalidad. 3. El diputado debe pagar su plan de jubilación, como todos los españoles. 4. El diputado dejará de votar su propio aumento de salario, que se congelará en esta legislatura. 5. El diputado dejará su seguro actual de salud y participará del mismo sistema de salud que los demás ciudadanos españoles. 6. El diputado debe igualmente cumplir las mismas leyes que el resto de los españoles. 7. Servir en el Congreso es un honor, no una carrera. Los diputados deben cumplir sus mandatos (no más de dos legislaturas); después, volver a la condición de ciudadano normal y buscar empleo o retomar sus antiguas ocupaciones. Seguro estoy de que estas medidas caerán bien a todos.