PAC a la carta por César Lumbreras

De los debates que han tenido lugar hasta el momento en el seno del Consejo Agrícola y del Comité Especial de Agricultura (CEA) sobre la reforma se desprende que los ministros quieren una PAC a la carta. Dicho de otra manera, plantean que se fijen una serie de normas generales y que se deje un amplio margen de libertad a cada uno de los estados miembros para aplicarlos de una manera o de otra. Eso sí, la financiación de esas medidas deberá correr a cargo de las arcas comunitarias. Estamos ante una renacionalización encubierta de la PAC, la única política común de verdad que hay y que ha sido la espina dorsal de la construcción comunitaria. Continúa así el camino que ya comenzó con las últimas reformas y que puede suponer el final de la PAC a medio plazo. Es cuestión de tiempo que los enemigos de la misma argumenten que, si los ministros quieren tener un amplio margen de maniobra en su aplicación, pues que la financiación corra también a cargo de cada Estado miembro.
Mientras tanto, el comisario ve cómo sus propuestas cosechan cada día que pasa más críticas. Precisamente, Dacian Ciolos anunció hace una semana, durante su visita a Córdoba y Jaén, un plan de acción y de apoyo para el aceite de oliva. Además, antes del verano convocará una reunión para hablar de este sector con los ministros de los estados miembros productores. En el plan se recogerán medidas de reestructuración en el marco de los futuros programas de desarrollo rural y otras que permitan mejorar la concentración de la producción apoyando a las cooperativas y organizaciones de productores. También planteó otra serie de actuaciones para mejorar la calidad, la comercialización y el etiquetado, así como para promocionar el aceite de oliva dentro y fuera de la UE. Los representantes de interprofesional pidieron que la nueva PAC mantenga y mejore los niveles de apoyo al olivar. Mientras tanto, los precios siguen bajos.