Aborto

El PSOE acusa al Gobierno de «integrismo radical»

El PSOE acusa al Gobierno de «integrismo radical»
El PSOE acusa al Gobierno de «integrismo radical»larazon

MADRID- Hasta cinco dirigentes del Partido Socialista salieron ayer a la palestra para criticar con dureza las palabras del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, en la entrevista concedida a este diario sobre la reforma de la ley del aborto, en la que aseguraba que la «malformación del feto no será ya un supuesto para abortar». Entre ellos, la vicesecretaria de organización del PSOE, Elena Valenciano, que preguntó a través de una entrada en su blog si el ministro «quiere volver a la hipócrita España de los años 70», en referencia a los paquetes de las agencias de viajes para abortar en aquella época. Y es que, según Valenciano, la «realidad» de España hace 40 años era la de «cerrar los ojos antes los centenares de miles de abortos que se practicaban dentro y fuera de sus fronteras con desigual suerte para las ricas y las menos ricas».
De manera oficial, la formación socialista emitió ayer un comunicado de la secretaria de Igualdad del PSOE, Purificación Causapié, en el que reprocha las palabras de Gallardón porque suponen «una amenaza de una penalización total» que nos retrotrae «a la clandestinidad y la inseguridad sanitaria y jurídica». Y añade el texto, «el PP deja claras las opciones a las mujeres españolas respecto a la interrupción voluntaria del embarazo: si tenemos dinero podremos salir de España para hacerla, si no, corremos los riesgos de la clandestinidad, la inseguridad sanitaria y jurídica», al mismo tiempo que indica que la reforma supone un «ataque más a los derechos de las mujeres españolas».
Otro de los arietes contra el ministro de Justicia fue el secretario del PSM, Tomás Gómez, que acusó a Gallardón de «querer recortar el derecho de las mujeres a decidir sobre su embarazo e imponer su ideología al conjunto de la sociedad». Para Gómez, la reforma es «una muestra de que el PP no sólo recorta en lo económico, sino también en derechos y libertades. Quiere un retroceso, nos está llevando a tiempos de antes de la Constitución de 1978. Lo que le pasa al PP es que está en contra de que las mujeres puedan decidir», el que incluso acusó de pretender «imponer su ideología de integrismo radical y religioso».