Cambios por agotamiento

Madrid- La duodécima victoria consecutiva del «Mou-Madrid» está en juego y ya se sabe que las posibilidades y la ambición del portugués por hacer historia son infinitas. Psicológicamente, además, reafirma superar el listón ganador de Guardiola, más aún con el clásico a la vuelta de la esquina.

Sin embargo, Mourinho no podrá acometer el reto con su once de gala. No es que desprecie al Dínamo, contra quien en el primer partido jugaron con el mejor equipo y fue «difícil»: ganaron por un solo gol cuando al Ajax y al Lyon, que no son colistas como el conjunto croata, endosaron goleadas. Es que a «Mou» no le queda otra opción: «Tengo a algunos jugadores muy, muy cansados». Y, además, cinco bajas por lesión, la mayoría en defensa: Arbeloa, Marcelo, Carvalho, Kaká y Di María. Además, Xabi Alonso está exhausto, lo ha jugado todo. La oportunidad de dar descanso al tolosarra no se podía dejar pasar, lo que propiciará que Sahin sea titular finalmente tras su llegada a Madrid y después de sufrir sendas lesiones de rodilla.
Lo mermado de la zaga impedirá, sin embargo, que Ramos acompañe a Xabi en el banquillo; eso sí, que se lo tome con más calma. Mourinho evitará con Lass que el sevillano tenga que recorrerse la banda y permanecerá de central, donde los dos últimos meses lleva haciéndolo «fantástico» (adjetivo por boca de Mourinho). Además, que Di María y Kaká no se hayan recuperado (y muy justitos llegarán al derbi de este fin de semana; casi descartados) propicia un hueco para Callejón o Altintop por delante de Lass.

Por su parte, el técnico del Dínamo, Krunoslav Jurcic, adelantó que intentará enfrentarse al Real Madrid de tú a tú. «Necesitamos poseer la pelota y una máxima agresividad en ese sentido», reveló el técnico portugués.

«Sin dudas, no fue penalti»
Respecto al duelo de Mestalla, tras el que Mourinho no dio su versión, ayer sí lo hizo de forma lacónica en cuanto a la jugada en la que el balón da en Higuaín. («Es claro que no fue penalti, si alguien tiene dudas, yo no las tengo», expresó) y de manera extensa respecto a su celebración: «El Valencia debería sentirse halagado. No se celebra de este modo si es un partido o un rival normal sino cuando es una victoria muy sufrida porque sabes que el adversario tiene capacidad para ganarte. El Valencia tiene equipo para ser campeón, tiene fútbol para eso. Si lo celebramos así, somos arrogantes, y si no lo celebramos, también dicen que somos arrogantes...».