Del Bosque: «El reto debe ser mantener los éxitos»

Si se realizara una encuesta entre todos los españoles para saber cuál es el hito más importante de 2010 no habría duda. La victoria de «La Roja» en el Mundial de Suráfrica. Por mucho que se le insista a su principal valedor, Vicente del Bosque repite una y otra vez que el mérito es de otros, que él es casi un mero espectador. Esto volvió a quedar de manifiesto ayer en la sede de este periódico, donde el seleccionador recogió el Premio al Personaje del Año.

Discreto, haciendo gala de su seriedad y generosidad, don Vicente compartió todos los méritos con los jugadores y los técnicos. El discurso no varió, pero Vicente se vio obligado a improvisar debido al sentido y cariñoso homenaje que le rindió el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy. Del Bosque comenzó su intervención con su habitual generosidad: «El premio es un reconocimiento a nuestro fútbol y a nuestros jugadores, que han demostrado una gran talla humana, calidad, esfuerzo e inteligencia, que han servido para que España logre algo extraordinario. Los Casillas, Ramos, Xavi, Torres y los demás son un ejemplo en los colegios e institutos». Para Del Bosque, hay una «responsabilidad de futuro que hay que asumir porque el éxito es más breve de lo que pensamos. Mantenernos debe ser una fijación. No podemos pasar de unir a España a mancillar la estrella (distintivo de la camiseta por lograr el Mundial de Suráfrica)».

En su intervención, Mariano Rajoy, «el próximo presidente del Gobierno», como le presentó Alfonso Ussía, se unió al homenaje a los campeones y alabó el trabajo del seleccionador nacional por «lograr por primera vez en la historia un Mundial de fútbol, un sueño imposible que nos hizo felices en un momento en el que lo necesitábamos». «Todos sabemos lo que pasó en Suráfrica. Para un padre saber que su hijo llora de alegría es algo que no se puede olvidar», recordó.

El presidente del PP recordó en su discurso la impecable trayectoria de Del Bosque, primero como jugador, después como entrenador de la cantera, del Real Madrid y, finalmente, de «La Roja».

El oficio de entrenador es un oficio difícil, como el de los gobernantes. Todo el mundo lleva un entrenador dentro, saben cuál debe ser la alineación en cada partido... ¡Cuántas personas querrían tener el teléfono de Del Bosque para darle instrucciones!».

Sobre la personalidad del seleccionador, Rajoy recordó que muchos han cargado contra él por su presunta falta de carisma. En cambio, dijo, «en este momento no conozco a nadie más moderno y con más carisma que Del Bosque. De todas formas, esto importa poco porque la vida pone a cada uno en su sitio».

Durante su intervención, el líder de la oposición hizo una radiografía personal del seleccionador a través de sus declaraciones. Del Bosque es un hombre familiar muy marcado por su abuelo, «un hombre recto, cabal y sin dobleces». «Si dicen que soy un hombre demasiado bueno, supongo que no será algo malo. No perjudica nunca ser buena persona.

No me van esos que dogmatizan y dicen que lo suyo es siempre lo mejor. Eso sí es peligroso». Otra de las virtudes ensalzadas por Rajoy a través de unas declaraciones realizadas por el entrenador en 2003 es su entrega. «He trabajado con formalidad, con orden y sin cachondeos. Hemos intentado frivolizar lo menos posible. No me gusta hablar en primera persona porque este trabajo ha salido gracias a gente que empezó en campos de tierra y ha logrado éxitos como la Champions y ligas. El mejor mensaje que ha dado en su vida es el que reflejan estas palabras. Este hombre es un señor», concluyó Rajoy.