Sevilla

La Junta llega al CPFF con un intento desesperado por controlar el déficit

La luz de alarma ya ha saltado en los ayuntamientos ante la preocupante situación financiera que soportan, pero en la Administración andaluza el panorama no es muy diferente.

La Junta llega al CPFF con un intento desesperado por controlar el déficit
La Junta llega al CPFF con un intento desesperado por controlar el déficitlarazon

Aunque, según los datos del Ministerio de Economía y Hacienda, Andalucía no pertenece al grupo de las comunidades autónomas más endeudadas de España, la Junta llevará al próximo Pleno del Consejo de Política Fiscal y Financiera –previsto para el miércoles– agotar al máximo el margen de endeudamiento permitido, fijado para este año en el 1,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB).
El Ejecutivo de Griñán está haciendo equilibrismos para mantener el listón del déficit. Andalucía ha consumido en el primer trimestre de 2011 más de la mitad de lo previsto para todo el año: un 0,75 por ciento. De ahí que el Gobierno andaluz esté apretando aún más el cinturón de las cuentas. En el último Pleno, la consejera de Hacienda y Administración Pública, Carmen Martínez Aguayo, anunció un nuevo recorte de 752 millones de euros del Presupuesto de 2011 debido a la caída de la recaudación y al aumento del gasto en el pago de funcionarios.
El presidente del PP-A, Javier Arenas, ya lo dijo en una entrevista que concedió a LA RAZÓN que «La Junta no nos dice toda la verdad del endeudamiento» y auguró que, si llega a la Presidencia, «nos vamos a encontrar deudas importantísimas en obra públicas o en el Servicio Andaluz de Salud».
Tan sólo la deuda en obra pública alcanza los 950 millones de euros, según cifra el Círculo de Empresas Andaluzas de la Construcción, Consultoría y Obra Pública (Ceacop). Este montante supone el 25 por ciento de la inversión en adjudicación de la Administración andaluza de 2008 a 2010.
Los instrumentos que antes se utilizaban para reducir la deuda ahora ya no son válidos. Tal es el caso de la venta de parte del patrimonio inmobiliario de la Junta, cuyas previsiones se han visto truncadas a causa de la escasa demanda del sector privado. Por ello, se tuvieron que buscar estrategias de ingeniería financiera para poder lograr unos ingresos que, según los Presupuestos para 2011, están cifrados en 951,7 millones de euros. La fórmula no fue otra que la venta, y su posterior alquiler, denominada como «sale and leaseback», a cargo de las empresas públicas Agesa y Sogefinpa. El pasado mes de enero la Consejería de Hacienda y Administración Pública informó de que llevaba vendidos 15 edificios administrativos, de los 75 previstos. Sin embargo, con esta medida no se amortiza la deuda porque la Administración autonómica se vende los edificios a sí misma.
Por lo que respecta a la sanidad, la deuda contraída por el SAS con sus proveedores asciende a los 846 millones de euros, toda vez que su morosidad alcanza los 464 días, según datos de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin). Sin embargo, la consejera de Salud, María Jesús Montero, rebajó recientemente la cifra a 550 millones y aseguró que la deuda «se está ralentizando».

Un complicado escenario para el Presupuesto
Si el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, calificó el Presupuesto para 2011 de «muy restrictivo», las previsiones para 2012 van encaminadas en la misma dirección. La abultada deuda y el complicado escenario financiero auguran unas cuentas con restricciones significativas. Antes del verano comenzará a elaborarse y entorno al próximo mes de octubre se presentará la envolvente económica. El Presupuesto para 2011 contempla una caída de la inversión autonómica que roza el 30 por ciento, situándose esta partida a los niveles del año 2005, hace más de un lustro.