Joselillo se recupera con dolores en las cervicales de la cornada del domingo

El torero vallisoletano José Miguel Pérez «Joselilllo» se recupera satisfactoriamente, aunque «con fuertes dolores en la espalda» por la gran voltereta sufrida, de la cornada que le propinó el pasado domingo el último toro de la ganadería de Dolores Aguirre cuando realizaba los primeros compases de la faena.La herida, de 20 centímetros a la altura del tercio superior interno del muslo derecho y que contusionó el nervio ciático, tiene en palabras del diestro castellano «muy buen aspecto». «Está drenando con normalidad, sangra mucho y me tira porque rompió músculo, pero está limpia, no se me ha infectado ni me ha dado fiebre, que es la mejor señal posible», comenta junto a la cama, que ya abandona para caminar con ayuda de una muleta. Sin embargo, no sucede lo mismo con el cuello, la espalda y el hombro después de una fea caída al albero que desembocó en una importante paliza entre las astas del animal: «Tengo mucho dolor y estoy molesto, sobre todo a la hora de dormir, porque lo tengo todo agarrotado como una tabla, me van a dar relajante muscular para que me ayude».Aunque todavía es prematuro siquiera que los médicos valoren la posible alta, Joselillo se muestra esperanzado de volver a estar en la cara del toro en junio, mes en el que «hay cerradas algunas cosas». «No sé si afortunadamente, porque es una desgracia, pero no tenía nada cerca, así que no tendré que forzar en la recuperación», afirma el pucelano, que apunta a San Fermín como su próximo gran compromiso. A pesar de la cornada y de no tener un lote propicio, Joselillo sale de San Isidro «con la conciencia tranquila». «Mi primero tuvo cierta intensidad, pero se acabó muy rápido y el otro, sabía de sobra lo que llevaba dentro, pero estás en Madrid y hay que ponerte delante, se quedaba ya en el capote a mitad del pase y en la muleta al sentirse podido, se acobardó hasta que hizo presa», concluye.