Los rebeldes luchan a la desesperada por Ras Lanuf

RAS LANUF- Una salva de cohetes grad marcó el inicio ayer de los combates. Cuarenta proyectiles fueron disparados por los rebeldes desde un camión lanzadera del Ejército. Ésta era la sorpresa que tenía preparada la resistencia para contraatacar a las tropas del coronel, que se estaban acercando peligrosamente al enclave petrolero de Ras Lanuf. Por primera vez desde que comenzó la guerra en el este, el ejército rebelde ha empleado artillería pesada para luchar contra las tropas de Gadafi. La línea de fuego estaba a sólo un kilómetro de las baterías antiaéreas, bazocas, cohetes y morteros. Unos doscientos soldados del ejército regular defendían las posiciones para impedir el avance de las tropas gubernamentales. Los hombres de Gadafi contraatacaron con bombardeos aéreos, artillería y carros de combate. Un espectáculo portentoso digno de una batalla épica que pudimos presenciar desde las lomas de una colina sobre el Mediterráneo.

Los gritos de «Allahu Akbar» se confundían con los rugidos de los cohetes, obuses y detonaciones. Lenguas de fuego ascendían hacia un cielo ennegrecido por el humo de las explosiones, mientras varios cazabombarderos se abrían paso entre las nubes en un vuelo amenazador; uno sobre el desierto y otro sobre mar, sobrevolando en círculo. Los rebeldes utilizaban toda su artillería para intentar derribar los aviones de guerra, que veloces desaparecían tras las columnas de humo después de bombardear la playa o en la márgenes del desierto.

Hubo momentos de confusión por la cantidad de proyectiles y municiones que disparaban los milicianos en todas direcciones, que podrían haber sido la causa del gran incendio que se produjo en la Terminal petrolera de Sidra, una pequeña localidad entre Ras Lanuf y Ben Yawad. Los rebeldes aseguran que fueron los cazas los que bombardearon las instalaciones.

El nuevo frente rebelde estaba a veinte kilómetros, más hacia el este que el día anterior, lo que sugería que las fuerzas del régimen habían avanzado. En la entrada de Ras Lanuf, que se ha convertido en centro de reclutamiento de voluntarios, centenares de jóvenes se agolpaban detrás del encargado de la lista de nombres para ir a luchar. Con un megáfono llama uno a uno a los reclutas para que dejaran el número de teléfono de algún familiar. Yumat sólo tiene 15 años y quiere ir al frente. «Mi deber es luchar por la revolución. No me importa morir. Alá me recompensará» declara nervioso este joven combatiente.

La caótica situación que se dio en el puesto de control contrastaba con la calma absoluta en las calles de esta ciudad fantasma, tras la estampida de los residentes. Únicamente los voluntarios permanecen allí. El martes, aviones de combate atacaron dentro del área residencial y un misil impactó en una de las viviendas desalojadas.

300.000 euros por la cabeza del líder rebelde
El régimen de Gadafi ha ofrecido una recompensa de 500.000 dinares libios (casi 300.000 euros) por la captura del presidente del Consejo Nacional Revolucionario Transitorio, Mustafa Abdel Yalil, según la televisión estatal libia. La televisión oficial libia indicó que la recompensa por información que facilite a la captura del «espía» asciende a 200.000 dinares libios. El anuncio fue emitido en árabe, inglés y francés.