Fútbol
«Si no pasa nada raro habrá luz»
El Madrid quería jugar a las 17:00 para evitar otro posible aplazamiento. «Haremos todo para arreglarlo a tiempo», dijo el presidente del Rayo
Madrid- Después del sabotaje y el aplazamiento del partido, mientras los jugadores del Real Madrid hacían un rondo sobre el césped y los hinchas del conjunto blanco esperaban a ser desalojados, comenzó la «guerra» por el nuevo horario del encuentro. El Real Madrid, en la voz de Miguel Pardeza, apostaba por las 17:00 y Paco Jémez aseguraba, junto al túnel de vestuarios, que ésta hora perjudicaría a muchos que tenían su entrada para ayer y hoy trabajarían durante la tarde. A Mourinho le interesaba cumplir con el compromiso de la quinta jornada con luz natural, para evitar que un nuevo aplazamiento complicara el calendario de su equipo en los próximos meses.
La precaución del cuerpo técnico madridista podría parecer excesiva, aunque no tanto escuchando las palabras del presidente Martín Presa a última hora de la noche: «Si no pasa nada raro, habrá luz. La empresa eléctrica nos ha asegurado que, casi con total seguridad, el destrozo podrá ser reparado. Pondremos todos los medios a nuestro alcance para que se arregle a tiempo, incluso poner todo el cableado nuevo», aseguraba el máximo responsable del Rayo en la Cope.
El sabotaje apunta a una «venganza» de algunos seguidores rayistas enfadados por el alto precio de las entradas y al hecho de que los socios tuvieran que pagar para ver al Real Madrid. Nadie todavía ha podido probarlo, pero sí que la acción fue lo bastante profesional como para asegurarse que no se pudiera solucionar ni fácil ni rápidamente. Fuera quien fuera, cortó los cables esenciales de los transformadores principales y consiguió su objetivo. Operarios del club madrileño subieron hasta lo más alto de la cubierta para encender los focos de forma manual, pero no hubo mucho que hacer más que empezar a valorar daños y adelantar trabajo para que nada falle hoy.
El choque será finalmente a las 19:45 horas, y con Sergio Ramos en el once titular tras su suplencia ante el Manchester City. Ésta era la gran noticia de la tarde hasta que, poco después de hacerse públicas las alineaciones oficiales, alguien dio al interruptor del Estadio de Vallecas y se comprobó que todo seguía a oscuras.
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