Moscú

El veto en la ONU reabre la Guerra Fría

La Razón
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Damasco- Tras el veto de Rusia y China a una resolución de la ONU contra el régimen sirio, ayer en Damasco ondeaban las banderas rusas. En el centro de la capital, los simpatizantes de Bachar Al Asad salieron a la calle para mostrarle su apoyo una vez más y celebrar el fallo de la ONU. El régimen se ve fortalecido tras el respaldo de sus aliados y sus fuerzas siguieron ayer con la represión violenta. Asimismo, el Ejército sirio y los militares desertores siguen enfrentándose en varias zonas del país, incluido los alrededores de Damasco. En la capital, la situación es de calma, y Asad pudo acudir tranquilamente ayer a una de las mezquitas principales de la ciudad para rezar, pero por la noche se pudieron escuchar disparos y explosiones en la distancia. Rusia dio ayer explicaciones de su veto el día anterior, alegando que en el texto de resolución de la ONU no incluía finalmente una condena de la violencia, también por parte de la oposición. Entre los pro-gubernamentales, la popularidad de Rusia es ahora más elevada que nunca, basada en una relación de amistad histórica, desde la época del padre del presidente Bachar. La división en la ONU reabre las viejas heridas de la Guerra Fría con Rusia y Estados Unidos manifiestamente enfrentados. Por su parte, Oriente Medio criticó con dureza el veto de Rusia y China a la resolución del Consejo de Seguridad sobre Siria en la última jornada de la Conferencia de Seguridad de Múnich (MSC), dedicada a la Primavera Árabe. Representantes de Yemen, Catar, Turquía, Túnez y Egipto cargaron contra el mal uso de la capacidad de veto de Moscú y Pekín, contra la lógica subyacente en el bloqueo y corresponsabilizaron a Rusia y China de la represión del régimen de Asad.