La lista

La lista de marras para un partido amistoso de la Federación Española de Fútbol en México va a traer cola. Aún resuenan los ecos del Campeonato del Mundo conquistado por nuestros hombres en Suráfrica y ya llega la polémica. Creo que el problema no es la lista en sí. Es cierto que hace un roto al Barça de cara a la Supercopa, pero si recordamos sólo las declaraciones previas, veremos que, aún cuando no se conocía la convocatoria con siete azulgrana, Guardiola ya avisó de que no había tiempo material para preparar el primer título de la temporada y que, aunque fuera uno solo de sus pupilos al otro lado del Atlántico, la cita era un inconveniente.
Ése es el problema: aceptar, cobrar y pactar un amistoso para ganar más dinero aún, a costa de las piernas de unos hombres que, en su mayoría, han tenido el mínimo descanso necesario y no han podido empezar a calentar de nuevo en la pretemporada. Esto de los bolos veraniegos va a terminar cargándose a los equipos, y no sólo los de la Selección. ¿Recuerdan cuando criticaban los entrenadores esos viajes a otros continentes a costa de la preparación de los jugadores? ¿Por qué tuvo que alinear Guardiola a Messi unos minutos en Corea? Por contrato.
¿Por qué tienen que ir la mayoría de titulares a México con Del Bosque? Por contrato. El problema no son las listas, sino esos contratos. El Barça, por Asia. El Madrid, por Norteamérica. Eso no es una pretemporada, eso es una gira de conciertos que luego se paga. Miren lo que ha pasado con Kaká: tenía molestias. No renunció a su selección. Ahora sufrirá él y el Real Madrid una baja de tres meses. Y se frustra un traspaso que era inminente.