La Generalitat no hará balance del ajuste de personal hasta julio

El decreto de prórroga de los presupuestos de 2010, que el Govern publicó el pasado mes de febrero, obliga a las empresas, fundaciones y consorcios, con más del 50 por ciento de participación pública, a reducir un 5 por ciento su plantilla antes del 30 de junio. En las 224 empresas públicas trabajan casi 50.000 personas, pero el recorte de plantilla no es matemático –el reajuste no supondrá el despido de 2.400 empleados ni se tocará a funcionarios con oposiciones ganadas–.

Sin embargo, hasta que no se aprueben los Presupuestos ni se acabe de reorganizar el entramado de empresas y entidades públicas, la última fase y la más arriesgada de la dieta planeada por el gobierno de Artur Mas no se podrá hacer balance del ajuste de personal. Esto no será «hasta julio», avanzó ayer el protavoz del Govern, Francesc Homs. Homs admitió que ha habido despidos, «lo normal, los ha habido antes y los habrá después», matizó. Los sindicatos cuentan 70, pero el portavoz se resistió a corroborarlos.