El plan oculto de Berlusconi

Roma- «Va a salir por la puerta para volver a entrar por la ventana», denuncia a LA RAZÓN Orlando, galardonado con el premio Konrad Adenauer y la Gran Cruz al Mérito Civil, entre otros reconocimientos.

«Estamos en contra de un Gobierno formado por el partido creado por Berlusconi, el Pueblo de la Libertad, y el opositor Partido Democrático. Tenemos miedo de que en Italia todo sea igual a su contrario. Este Ejecutivo, en el que convivirían ambas formaciones bajo la guía de Mario Monti, podría durar hasta un año y medio. Nuestro temor es que cuando se acerque la cita con las urnas ‘Il Cavaliere' se presente como el salvador del país, como una novedad, y lidere de nuevo al centro derecha como si no hubiese pasado nada. Deja el poder ahora a sus hombres para volver luego. Es una opción genial y maléfica», advierte el ex alcalde de Palermo.

Celebrar comicios cuanto antes es, en su opinión, la mejor manera de «limpiar» para siempre el «velo del berlusconismo» que ha caído sobre la sociedad italiana. «Primero hay que dar una respuesta a Europa y a los mercados internacionales y luego modificar la ley electoral. A continuación hay que ponerse en marcha para liberar a Italia de Berlusconi». Para Orlando, la opción de un Gobierno de unidad en el que tengan cabida los hombres del magnate es «inaceptable». «¿Podemos confiar la responsabilidad de apagar el incendio a los pirómanos que lo han encendido?», se pregunta, considerando que el nuevo ejecutivo sólo sería «técnico» de nombre.

Al compañero del ex magistrado Antonio Di Pietro en Italia de los Valores le duele la situación por la que está pasando Italia: «Con todos los respetos, no somos ni Grecia, ni Irlanda ni Portugal. Somos una gran nación, con una economía fuerte y con empresarios que innovan y producen, pero si no intervenimos sobre la crisis financiera, corremos el riesgo de que, después de ordeñar la leche, matemos a la vaca». Su partido propone una reforma integral que le cambie la cara al país. «Hay que eliminar las leyes ad personam, aprobar la normativa sobre el conflicto de intereses que evita que alguien como Berlusconi llegue al poder, luchar de verdad contra la evasión fiscal y poner fin a los privilegios de los especuladores financieros». Para Orlando, «Il Cavaliere» ha sido un «aspirante a dictador del Tercer Milenio» durante los 17 años que ha durado su aventura política. «Aquí se ha mortificado la democracia. A él le molesta la oposición, Europa, el presidente de la República, el Parlamento, el Tribunal Constitucional, los jueces, la Prensa... Cuando alguien se molesta con todas las instituciones, eso demuestra que no es democrático».

Aunque Berlusconi no se ha presentado «con la cara ni la camisa negra» de Benito Mussolini, ha intentado seguir sus pasos adaptándose a la realidad contemporánea. En las próximas elecciones, Italia de los Valores tiene previsto concurrir en coalición con el Partido Democrático y la formación Izquierda Ecología y Libertad. Aunque la perspectiva de un Gobierno de varias agrupaciones de izquierdas no invita a la tranquilidad, Orlando sostiene lo contrario. «Tenemos pensado consensuar un programa de diez puntos básicos con nuestros aliados y presentarlo juntos a los electores para que no haya divisiones». 

Medidas de urgencia
El ritmo en la toma de decisiones se ha vuelto vertiginoso en Italia. Todos piden agilidad para sacar lo antes posible al país de la encrucijada en la que se encuentra. Ayer mismo el diario económico «Il Sole 24 Ore» hacía una seria llamada a la clase política italiana para que olvide sus propios intereses y salve al país. Todos son conscientes de la gravedad de la situación económica y piden soluciones ya.