IAG pedirá el viernes a Iberia un ajuste de 5000 empleos

Madrid- El consejero delegado de IAG, la empresa resultante de la fusión entre British Airways e Iberia, dará el próximo viernes el pistoletazo de salida para el ajuste en la compañía española de bandera que, casualmente, ha convocado a todos sus sindicatos a una reunión oficial para ese mismo día. Willie Walsh aprovechará el «Investor's Day» de IAG, una junta de accionistas informal, para dar cuenta de la situación de las dos compañías, confirmar las bondades de la fusión realizada en abril de 2010 y pedir medidas de ajuste en Iberia.
Mañana, IAG celebra un consejo de administración que se presume tenso a tenor de las cifras que la empresa va a presentar a sus accionistas: Iberia se ha «comido» los beneficios de British Airways, lo cual los accionistas van a considerar insoportable en el medio plazo en un mercado en el que la competencia es extrema. IAG perdió en el primer semestre del año 390 millones de euros antes de impuestos, cuando en el mismo periodo del año anterior obtuvo beneficios de 39 millones. Después de impuestos, los resultados negativos se sitúan en 231 millones, frente a ganancias de 71 millones en 2011.

Según ha podido saber LA RAZÓN, IAG baraja un recorte de plantilla en Iberia de entre el 20 y el 25% de la plantilla, lo que equivaldría a hablar de entre 4.000 y 5000 personas sobre un total de 20.000 trabajadores.

Competir
En IAG se considera imprescindible ajustar los costes del corto y medio radio, que siguen por encima de las «low cost» con las que compite Iberia Express y el resto de las compañías de bandera como Lufthansa, Air France o Alitalia. La matriz de British Airways e Iberia considera también que en los desplazamientos de largo radio –las conexiones entre España e Iberoamérica–, en los que la compañía española ha puesto su foco desde hace ya algunos años, los costes de Iberia, fundamentalmente por los pilotos, están un 15%/20% por encima de los de sus competidores europeos y de Lan Chile, el rival en ese lado del Atlántico.

Además, IAG no está muy de acuerdo con la política comercial de la compañía, que hace unas fechas sustituyó al director comercial, Manuel López Aguilar, por Gavin Halliday.

Los sindicatos de Iberia han pedido a la compañía que elabore un plan de viabilidad en el que participen, han advertido de que se opondrán a cualquier proyecto que «se limite a ser un plan de acción a corto plazo, sin más contenido que la eliminación de puestos de trabajo, reducción de salarios o condiciones laborales para que salgan las cuentas».

Según informa Efe, los representantes de los trabajadores han exigido que si se acometen dismuniciones de plantilla se hagan en el marco del ERE 72/01 y han expresado su total oposición a que cualquier trabajador de Iberia –sea personal de tierra o vuelo– pueda perder su empleo mientras el conjunto de la compañía o de sus filiales mantenga o aumente la producción.

Un ajuste esperado
En agosto, el consejero delegado de Iberia, Rafael Sánchez Lozano, adelantó ya que la garantía de viabilidad de la compañía afectará a su tamaño, a las «condiciones laborales de los empleados y al volumen de empleo».

En esta línea, Willie Walsh se dirigirá a sus accionistas, en un momento delicado para el sector, muy afectado por la crisis económica internacional y por el aumento de los precios del combustible, que suponen una tercera parte de los costes totales de las aerolíneas.

La compañía eleva un 5% sus viajeros
El «holding» resultante de la fusión Iberia-British transportó 46,3 millones de pasajeros en los diez primeros meses del año, lo que representa un aumento del 5,6% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, informó el grupo este martes en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De enero a octubre, registró un aumento del 10,7% en las rutas domésticas (Reino Unido y España), hasta 10,2 millones de viajeros, mientras que el resto del mercado europeo obtuvo un ascenso del 2,6%, hasta 19,6 millones. En el resto de los mercados, también obtuvo mejoras, con aumentos del 6,7% en Norteamérica (7,2 millones); del 16% en África, Oriente Medio y Sur de Asia (3,9 millones); del 2,1% en Asia-Pacífico (1,3 millones de viajeros). No obstante, en Latinoamérica IAG transportó un 1,4% menos de pasajeros, hasta los 3,9 millones.