«Por la tasa de congestión sí iremos hasta el Tribunal de Luxemburgo»

SEVILLA- El Ayuntamiento de La Línea ya ha dejado claro que no va a entrar en litigio contra el Estado por la señalización de tráfico que instaló para desviar a los camiones a la N-351, una vez que el Juzgado de Algeciras respondiera al recurso de la Abogacía del Estado tomando las requeridas «medidas cautelares». Ahora bien, el proyecto de la tasa de congestión para los vehículos que acceden a Gibraltar, con la que pretende recaudar en torno a 30 millones de euros, es otra cosa. Para ese empeño, el Ayuntamiento llegará pleiteando hasta el Alto Tribunal Europeo de Luxemburgo si hace falta, según declaró ayer a LA RAZÓN el alcalde de La Línea de la Concepción, Alejandro Sánchez. El regidor gaditano añadió, asimismo, que la retirada de las señales de tráfico «no impide, en absoluto», que se pueda llevar a cabo el proyecto de la tasa de congestión y que el único objetivo del Ayuntamiento era responder a la decisión de Fomento de poner el sábado pasado unas señales que daban prioridad en la Verja al tráfico de Gibraltar. La Abogacía del Estado señala, sin embargo, en su recurso que lo que pretende el Consistorio es dar un paso más para preparar el futuro «peaje».
Las críticas volvieron a lloverle ayer al regidor del Partido Popular. El más duro –como es habitual– fue el portavoz parlamentario del PSOE, Mario Jiménez. Lo comparó con un «dictador bananero» y le censuró que «se invente una tasa para paliar la absoluta ruina» del Ayuntamiento. El martes, otro miembro de su partido lo comparó con Hassan II. Así las cosas, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, calificó de «auténtico desastre» la gestión municipal y pidió a Alejandro Sánchez que solucione los problemas del municipio «con los medios propios» y no con «peajes urbanos».
Por su parte, el diputado nacional del PP José Ignacio Landaluce reclamó al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que «cumpla con su palabra» y visite La Línea este mes de septiembre, tal y como él mismo se comprometió en una reunión con el alcalde linense en julio.