Mourinho recupera la fe

Madrid- El estreno del Real Madrid en la Liga de Campeones llega en el peor momento, «o quizá en el mejor», reflexiona Mourinho en voz alta. El cambio de competición, la «Décima» en juego y el rival, el Manchester City, el campeón de la Premier y, a priori, junto al Madrid, el equipo más fuerte del Grupo D, son suficiente motivación para que el equipo reaccione, los resultados de la Liga queden en un segundo plano y arranque una dinámica vencedora y de juego y compromisos colectivos. El técnico está convencido de que hoy «sí tendrá equipo». «Será solidario, todos querrán trabajar para todos y los jugadores estarán a tope en sus principios profesionales y afectivos. Quizá nos faltarán un poco de confianza y autoestima, porque no es fácil jugar contra el City tras haber hecho un encuentro fatal. Puedo equivocarme, pero creo que estaremos a tope». Así lo espera, porque ninguno de sus jugadores es desconocedor de que el Manchester City lleva meses sin perder. Los ingleses han comenzado la temporada tan bien como la terminaron, a diferencia del Real Madrid.

El técnico no quiso incidir en el discurso recriminatorio de Sevilla –que aseguró en TVE que sólo hizo después de decirles previamente lo mismo en el vestuario y que no era la primera vez–, pero sí hizo hincapié en su responsabilidad. «El culpable principal soy yo. En mis equipos, cuando ganamos, todos ganamos, y cuando perdemos, es responsabilidad mía. Yo soy el responsable de no haberlos sabido motivar», sentenció. Ahora bien, negó la mayor cuando se le sugirió que había jugadores que pensaban que estaban mal físicamente por una temporada excesivamente dura. «A mí no me lo han dicho. Quizá puedan referirse a ese viaje a Puerto Rico que interrumpió la preparación y que hizo volver a algunos dos días antes del comienzo de Liga. Aquello fue una aberración. Aquí todo se hace con profesionalidad. Yo ya estoy programando la pretemporada 2013-2014. De eso no se nos puede acusar. Hemos preparado la temporada como la pasada, en que lo hicimos bien. Si hay que acusar a alguien es a quien hace los calendarios», dijo «Mou».

De cualquier forma, como dijo Khedira, «el técnico tiene razón y todo el derecho del mundo de decir lo que piensa de nosotros en público cuando hacemos un mal partido». En la misma línea, Mourinho afirmó que «su relación con los jugadores no podía ser mejor». «Creo que es imposible mejorar una relación plantilla-entrenador como la que tengo».

Mourinho hará cambios hoy en el once. Pero nada tendrán que ver con los siete que dijo que le hubiera gustado hacer en el Sánchez Pizjuán y pide que el público no dé por «señalados» a los que no repitan porque los cambios serán los «convenientes» en función del juego del rival. El City, como el Barça, es un equipo con mucho potencial goleador, así que el Madrid deberá reforzar la defensa y Coentrao podría aparecer en el lateral izquierdo. Para buscar y abrir huecos, Modric y Benzema serían la opción, aunque Khedira blinda mejor el centro del campo y a éste tampoco extrañaría verlo instalado en el lateral derecho.

En el City, Roberto Mancini, que ya sabe lo que es enfrentarse a Mourinho, no descartó la titularidad de Agüero, ya recuperado de su lesión. Eso sí, al gran motor de su centro del campo, David Silva, lo trae descansado. Como al ex madridista Javi García, goleador la pasada jornada en la Premier. A quien más teme el italiano es a Cristiano: «Si se puede quedar en casa, mejor», bromeó.

PLEBISCITO EN EL BERNABÉU
Es la incógnita para el estreno en la Liga de Campeones. ¿Cómo recibirá el Bernabéu a Cristiano Ronaldo después de que éste hiciera pública su «tristeza» tras el partido ante el Granada? La derrota del Real Madrid en el Sánchez Pizjuán le ha hecho «un favor» al portugués, porque el plebiscito del coliseo madridista se extenderá al colectivo, a todo el equipo. Además, la posible reacción del público la quiso dirigir ayer Mourinho hacia todo el grupo, igual que ha hecho él, sin apuntar con el dedo a ninguno de sus futbolistas en particular: «No quiero individualizar. Creo saber cómo recibirá la afición al equipo, pero no al jugador A, B o C». En este tiempo, los jugadores de la plantilla siempre han expresado su confianza en que el madridismo recibirá bien a Cristiano y, si cabe, «con más aplausos de los habituales».