La Habana
España negocia el regreso de Carromero tras la sentencia
Un tribunal cubano le condena a cuatro años de cárcel; la Fiscalía pedía siete. El Gobierno trabaja para que se aplique un convenio bilateral o se acuerde la expulsión
BUENOS AIRES, MADRID- Un tribunal provincial cubano condenó ayer a cuatro años de cárcel por homidicio imprudente a Ángel Carromero, el joven político español que conducía el coche implicado en el accidente en el que murieron el destacado disidente Oswaldo Payá y Harold Cepero. Tres años menos que lo que reclamaba la Fiscalía.
Carromero, de 26 años y vicesecretario de Nuevas Generaciones del PP en Madrid, fue procesado por «homicidio» el 5 de octubre, en un juicio de un día en el que admitió que perdió el control del vehículo en un tramo de una vía en reparación e impactó contra un árbol. En el accidente, ocurrido el 22 de julio, fallecieron Payá, de 60 años y fundador del Movimiento Cristiano Liberación, y el también disidente Cepero, de 31 años. Al igual que el conductor español, sobrevivió Jens Aron Modig, de 27 años y líder de la Liga Demócrata Cristiana de Suecia. La familia de Payá siempre ha sostenido que Carromero es inocente y en un principio atribuyó la muerte de Oswaldo a un accidente provocado por un vehículo de color rojo.
«Abanico de posibilidades»
Las autoridades cubanas permitieron a Modig regresar a su país días después del accidente tras declarar a los periodistas que estaba en Cuba por motivos políticos, y disculparse por entregar 4.000 euros a los disidentes y participar en actividades «ilícitas».
El juicio de más de 11 horas contra Carromero estuvo marcado por la detención de varios disidentes y las fuertes medidas de seguridad desplegadas.
Tras la condena, el Gobierno español negocia el regreso de Carromero a España con dos posibles salidas. Si se aplica el Convenio Bilateral de 1998 sobre la ejecución de penas, que permitiría al joven cumplir la condena en España. O bien, la posibilidad de que se acuerde la expulsión del dirigente de Nuevas Generaciones, lo que supondría la suspensión de la pena. Así lo confirmó ayer el cónsul general de España en Cuba, Tomás Rodríguez-Pantoja, que explicó que al tratarse de una condena menor a cinco años existe un «abanico de posibilidades» para aplicar dicho convenio.
Tampoco es un dato menor que en un mes se celebrará la Cumbre Iberoamericana en Cádiz. Las únicas delegaciones que aún no han confirmado su presencia son Venezuela y Cuba. La Habana podría estar presionando para que la declaración final incluya una condena al bloqueo de EE UU y la UE al régimen de los Castro. En este sentido, el Gobierno español no invitó el pasado 12 de octubre a los opositores cubanos a la Embajada de España en La Habana el Día de la Hispanidad.
Desde el Ministerio de Exteriores insistían ayer, no obstante, en que el proceso judicial aún no ha concluido y que la sentencia «no es firme». Las mismas fuentes aseguraron que se están estudiando todas las opciones que hay sobre la mesa para que Carromero vuelva a España en esta «nueva fase» y «de forma conjunta con las autoridades cubanas».
Lo cierto es que desde la detención del dirigente de Nuevas Generaciones, el Gobierno ha tratado de que la discreción marcara la pauta para que las informaciones publicadas no afectaran negativamente a la forma en que La Habana encara el caso. Aun así, fuentes diplomáticas reconocieron a LA RAZÓN que la reunión mantenida en Nueva York por el jefe de la Diplomacia española, José Manuel García-Margallo, y su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, el 27 de septiembre fue «muy, muy bien» y hacía albergar esperanzas de que la conclusión sería positiva.
Ambos ministros quedaron en que hablarían después de que se publicara la sentencia y ese momento ha llegado. Está previsto que Margallo efectúe hoy sus primeras declaraciones públicas sobre la condena. Por este motivo, ningún compañero de partido de Carromero quiso ayer adelantarse, pese a que la sensación general es que la expulsión podría traer al joven político a casa.La defensa de Carromero deberá decidir si quiere recurrir la sentencia ante el Tribunal Supremo Popular, lo que supondría retrasar más el proceso, por lo que la apelación parece descartada.
En declaraciones a LA RAZÓN desde Cuba, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Elizardo Sánchez, mostró su pesar por la condena, ya que «esperábamos una absolución» al existir dos atenuantes: «Uno, el mal estado de la carretera y dos, la poca señalización vial alertando sobre la condiciones de la pista». Sobre la posibilidad de que la defensa de Carromero recurra, Sánchez dijo que «nosotros recomendamos apelar porque el Supremo investiga con más profundidad los atenuantes». Sánchez cree que la sentencia ha sido «adoptada por cuestiones de índole política» y que «el tribunal le ha dado un ropaje técnico para justificar la sentencia». Entretanto, está previsto que Carromero sea trasladado hoy a La Habana.
¿Qué puede pasar ahora?Expulsado de cuba. se libra de la penaÁngel Carromero puede ser expulsado de Cuba. En este supuesto, el dirigente de Nuevas Generaciones quedaría en libertad y no tendría que cumplir la condena. Sin duda, es la opción más beneficiosa para él.
Cumplir la sanción en España
Según el convenio bilateral firmado por Cuba y España, vigente desde 1998, Ángel Carromero podría cumplir la condena, o una parte, en España. El Gobierno trabajará en esta opción en caso de que no sea expulsado.
Pasar los cuatro años en Cuba
Si las presiones del Gobierno no tienen éxito, Carromero deberá cumplir la pena en una cárcel de Cuba. Su caso se podría parecer al del empresario norteamericano Alan Gross, encarcelado por un delito contra el Estado.
✕
Accede a tu cuenta para comentar