«Piloto español coche italiano y diseño griego»

La Fórmula-1 no es ajena a la crisis, pero en el Mundial no mandan los mismos países que en la política y economía globales. El circuito alemán de Hockenheim acogió la décima cita de la temporada y en numerosos foros, desde el sábado, se reflejaba una situación que nada tiene que ver con la realidad económica continental. Alemania y Francia son dos de los países más poderosos de la Unión Europea, todo lo contrario que ocurre en la Fórmula Uno. El campeón en Alemania ha sido un español, con un coche italiano y cuyo diseño, en gran parte, ha sido responsabilidad de un griego, Nikolas Tombazis, el responsable de aerodinámica de Ferrari. El propio Fernando bromeó con la curiosa situación en el podio a preguntas de Niki Lauda, improvisado maestro de ceremonias en el podio. «No entiendo demasiado de política, pero es cierto. La situación no está muy bien en España, pero un piloto español, pilotando un coche italiano, diseñado por un griego... está bien ganar aquí», comentó Alonso ante millones de espectadores que seguían la carrera por televisión.

Y es que, al contrario de lo que sucede en otros muchos ámbitos de la realidad, el papel de Alemania en la F-1 no es nada destacado, a pesar de tener cinco pilotos en la especialidad e incluso poseer un equipo propio, Mercedes, que no termina de destacar. Incluso, hace unas semanas se rumoreó que podrían retirarse a final de temporada tal y como ha sucedido con otras marcas como Renault (ahora sólo suministra motores), Honda o Toyota. El origen de la idea expresada por Alonso parece que fue responsabilidad de Luis García Abad, representante del piloto asturiano que, vía Twitter, realizó este comentario el pasado sábado.

En cualquier caso, la crisis económica no sólo afecta a España, Italia o Grecia. Incluso la Fórmula Uno pretende recortar gastos. El abanderado de este movimiento es Luca di Montezemolo, presidente de Ferrari, que en las últimas semanas anda sopesando su entrada en la política italiana. De momento, Ferrari va muy bien en el Mundial y eso incide mucho en las ventas de su propietario, el grupo Fiat.