En el andén y sin billete

Andalucía lleva treinta años llegando tarde y todo hace indicar, si nada lo remedia, que volverá a hacerlo otra vez. A José Antonio Griñán le salió bien retrasar –cómo no– las elecciones, algo que el PP califica como «el único acierto» de su etapa como presidente autonómico, y ahora tampoco es que vaya a descarrilar en su intento por salir de la crisis. Todo lo contrario, prefiere atrincherarse en su propio campo. Donde está cómodo y le hacen sentirse así. Sin destaparse.

Asegura José Luis Sanz, secretario general de los populares andaluces, que la comunidad «perderá el tren» de la recuperación económica. Habla en su extensa entrevista a LA RAZÓN de «indicios» de reacción después de un largo túnel de oscuridad. Pero los Presupuestos de la Junta para 2013 suponen un viaje al pasado, la peor noticia para correr en igualdad de concidiones con el resto del país.

El vaticinio del PP es claro: «Sin inversiones, más paro». Pero eso poco importará porque la fábrica de «vender humo», con instrumentos como RTVA, seguirá funcionando a pleno rendimiento. Lejos, eso sí, de la alta velocidad que se requiere. Así que mientras tanto, Andalucía espera en el andén a que llegue su momento, pero sin billete. La riqueza que genera la inversión tendrá que esperar no se sabe hasta cuándo.

En la otra acera aguarda Zoido, «un magnífico candidato» para la región, llegado el caso, casi para todos. Un ganador arriesga y un perdedor se protege. La vida misma.