La izquierda abertzale pide «romper amarras» con España porque es un lastre

Moreno ha intervenido en un acto político en Vitoria con el lema "Aldaketa haizea dabil-Viento de cambio", organizado por la izquierda abertzale y el sindicato LAB, centrado en la crisis económica y en la necesidad de abordar "un cambio político y social"basado en la soberanía para superar el actual modelo de Euskal Herria.

En un comunicado, Moreno ha acusado al PSE-EE, a UPN y al PNV de ser "incapaces"de plantear una alternativa para salir de la crisis y también ha criticado las "recetas"del PP que debilitan el sector público y salvan al sector financiero.

"Si son un lastre, rompamos amarras, cuanto antes mejor", ha indicado Moreno tras reivindicar herramientas "en lo político, económico, laboral y fiscal para poder decidir"en Euskal Herria.

"Aquí vivimos, trabajamos, sufrimos y disfrutamos; aquí queremos decidir. No queremos que nadie decida por nosotros, ni en Berlín, ni en París ni en Madrid", ha enfatizado el dirigente de la izquierda abertzale.

Ha asegurado que hay alternativas a la política de recortes y una salida más justa socialmente y ha afirmado que el pueblo vasco está "preparado para la soberanía"porque tiene recursos propios, porque es un pueblo "vivo y activo"y porque tiene un mundo sindical fuerte, un sector industrial competitivo y un mundo cooperativo audaz.

También Txelui Moreno ha dicho que los mismos que generaron la crisis con la ayuda de partidos como el PSE, PNV y UPN "son los mismos que hoy mantienen políticas vengativas, inhumanas y crueles en política penitenciaria"y los que no reconocen a todas las víctimas.

Moreno también ha participado en el acto de homenaje que partidos y sindicatos de la izquierda abertzale han tributado hoy en Vitoria a los cinco trabajadores que murieron el 3 de marzo de 1976 durante una carga policial en el barrio vitoriano de Zaramaga, en la que también resultaron heridas más de cien personas.

El portavoz de la izquierda abertzale ha señalado que el mejor homenaje que se puede dedicar a los fallecidos es "seguir luchando hasta conseguir cambiar el actual estado de las cosas", por lo que ha animado a la participación en la huelga general del 29 de marzo convocada en el País Vasco por los sindicatos nacionalistas.