Oído en Moncloa

Qué tal Presidente.
–Buenos días, Presidente, cómo te va.
–Bien, muy bien. Dentro de un rato voy a anunciar a la prensa la liberación de los cooperantes españoles secuestrados por Al Qaida.
–Ah! ¿Será en nuestra comparecencia conjunta?
–¿Conjunta? No, no. Sal tú primero y cuentas que hemos desbloqueado lo del puente de Cádiz y esas autovías que tanto te quitan el sueño y luego comunicaré yo en solitario la liberación de los secuestrados.
–¿Pero harás referencia a las inversiones en Andalucía?
–Claro, claro, aunque igual los periodistas sólo preguntan por lo cooperantes. Además imagina que si comparecemos juntos nos van a empezar a preguntar por las encuestas, por las primarias…
–Y ya que lo dices, qué vamos a hacer con… (suena un móvil)
–Perdona, Pepe… (se aleja con el celular)… Dime Rubalcaba, cómo te va por Rabat… Sí, sí, Moratinos me asegura que los cooperantes ya han subido al avión… Bueno, te dejo, que tengo aquí a Griñán preocupado por las chirimoyas de la costa tropical… (risas)… Por supuesto, no voy arriesgar a que me dimita… (acercándose nuevamente)… ¿Decías Pepe?
–Sí, José Luis, que lo que tenemos que arreglar es la situación en Almería y en Córdoba, los candidatos. Y encima en Málaga pidiéndome primarias…
–No te preocupes, Pepe, estamos mejor de lo que parece y lo vas a ver muy pronto. Ahora lo que importa es que la economía se recupere y que los bancos y cajas vuelvan a dar crédito.
–¿Esta vez me ayudarás con lo de Unicaja y Cajasol?
–(Se encoge de hombros) Ya sabes cómo es Mafo pero ten confianza… Por cierto, como este verano no he ido a Doñana, ¿sabes si ha nacido algún nuevo lince? Eso sí, dinero para la carretera de Matalascañas no hay.