Una multitud de devotos visita al «Jesús pobre» del barrio de La Latina

Un año mas, y ya van ocho, la Iglesia de San Pedro el Viejo, de Madrid, expone a todos sus fieles y demas devotos la talla restaurada de Jesus de Medinaceli «El Pobre», una talla que data del siglo XVIII y que es todo un referente en el barrio de La Latina, donde los devotos la visitan cada viernes.

La figura, que es la principal de la iglesia, junto con la de María Santísima del Dulce Nombre en su Soledad, se mandó restaurar hace ocho años, debido a que las manos habían empezado a deteriorarse con el paso del tiempo y estuvieron a punto de deshacerse por completo. Gracias a un magnífico trabajo artesano de la familia Solís, un proceso que duró 3 meses, la talla quedó impecable y la junta directiva de San Pedro el Viejo decidió que cada aniversario iban a dejar que todo el quisiera se acercarse a besar las manos del Cristo con admiración y devoción.

En este día la talla se expone sin túnica (la imagen tiene 21 túnicas distintas). Venir a besar a Jesus el Pobre era ya una tradición hace 200 años, cuenta el Hermano Mayor, Francisco Javier Ruiz. Por eso, cientos de personas se han pasado este viernes 3 de diciembre a uno de las devociones más concurridas de Madrid.

Mari Carmen, una fiel devota de Jesús el Pobre que lleva más de treinta años visitando este Cristo, ha transmitido esta costumbre a su hija, que este año se hizo miembro de la hermandad. Francisco afirma que "Jesús el Pobre"es un referente en su vida, "porque siempre me escucha todo lo que le pido y muchas cosas me las concede". La familia de María lleva tres generaciones visitando al Cristo todos los viernes, al que presentan sus preocupaciones.

En la procesión del Jueves Santo, la imagen es todo un referente en la capital, que atrae una gran multitud de público que la espera desde primera hora de la mañana. "Este es el Cristo del Barrio de la Latina y de todos los pobres", afirman en la hermandad.