Convenios colectivos
El Banco de España insta a flexibilizar los salarios para bajar la inflación
Pide a sindicatos y patronal que apuesten por convenios de empresa, en el marco de la negociación colectiva.
Los precios seguirán al alza, la competitividad se verá socavada y la actividad económica se reducirá, a la par que merma el empleo. Todo ello ocurrirá si no se flexibilizan los salarios. Así lo advirtió ayer el Banco de España en la última edición de su Boletín Económico, en el que, además, instó a la patronal de los empresarios y a los sindicatos a abordar este asunto en el marco de la reforma de la negociación colectiva. En un contexto marcado por un repunte del IPC, la entidad presidida por Miguel Ángel Fernández Ordoñez advirtió de que si bien debería ser temporal y una parte obedece al impacto de algunos incrementos impositivos, así como a la subida del precio del petróleo, si se mantienen estas pautas de determinación salarial la tasa de inflación continuará disparada.
La solución, a juicio del Banco de España, pasa por la política de Angela Merkel; es decir, insiste en que los salarios se deben desvincular de los precios, para referenciarlos más a la productividad y adaptarlos así a la situación económica que todavía sufrimos. El organismo estimó necesario acabar con la «elevada inercia y la escasa flexibilidad del modelo de negociación salarial español», para frenar la volatilidad del empleo. Una rigidez que se hace aún más patente, según advirtió, en el caso de los trabajadores que están cualificados y tienen contrato indefinido. Así, el banco emisor alertó de que «la negociación a escala de empresa acaba ofreciendo incrementos salariales más elevados que los negociados en el ámbito sectorial».
Urge, por tanto, a que sindicatos y empresarios apuesten por los convenios de empresa. En cualquier caso, según los agentes sociales, esta cuestión está fuera del guión de la mesa que debe cerrar, antes del 19 de marzo, la reforma de la negociación colectiva. No obstante, el Banco de España sugiere ya que cualquier cambio, aunque necesario, es tardío. «Sólo en 2010, con dos años de retraso desde el inicio de la crisis, se produjo un proceso de moderación salarial, para el periodo 2010-2012». Además, señala que el número de parados de larga duración, es decir, que llevan más de un año desempleados, alcanzó el 45,9% en 2010. El caso se agrava para los mayores de 45 años, al afectar, según la entidad, al 52,6% del total.
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