San Diego
Las parroquias de Lorca celebran misas y comuniones en jardines y en patios
Las parroquias de la ciudad murciana de Lorca han celebrado hoy sus oficios religiosos en lugares improvisados como jardines, patios y salones, ante la imposibilidad de hacerlo en sus iglesias, ya que la mayoría ha quedado gravemente dañada por los terremotos del pasado miércoles.
Muchos de los templos catalogados como patrimonio cultural, según ha certificado la administración autonómica, tendrán que permanecer cerrados durante un largo tiempo por los desperfectos que han sufrido sus estructuras, ante lo que el arzobispado de Cartagena ha autorizado la celebración de eucaristías extraordinarias y otras ceremonias en otros lugares.
De esta forma, el jardín de San José ha servido de escenario para la primera comunión de seis niños, ceremonia que se ha celebrado bajo un carpa provisional en la que se ha instalado un altar y a la que han acudido decenas de invitados.
Este no ha sido el único espacio improvisado para el culto católico, ya que la iglesia del Carmen ha oficiado dos misas en un pabellón; la de San Mateo lo ha hecho en un salón parroquial, al igual que la de Santiago; la de San Cristóbal y San Diego en la misma capilla, y la del convento de la Virgen de las Huertas, en uno de sus salones.
En esta última habitación se ha instalado la imagen de la religiosa que da nombre al templo y un púlpito en el que el sacerdote, algo contrariado por la presencia de los medios de comunicación, ha oficiado la misa. "Estamos tristes por lo que ha pasado, nuestras caras lo reflejan, pero también debemos estar alegres porque hemos escapado de la trampa del cazador que han sido los dos terremotos", ha dicho el cura durante la homilía, con ruido de fondo ocasionado por las obras de reconstrucción.
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