«Overbooking» en Formentera

Michelle Obama, en Marbella. Belen Esteban y cía., en Benidorm. Y el resto, a Formentera. La isla más pequeña del archipiélago balear se ha convertido este año en la escapada favorita de «celebrities» de todo pelaje y condición. Tiene las millas justas de distancia para huir en un santiamén de la locura ibicenca y de la oficialidad mallorquina, pero para calmar las conciencias de aquellos que precisan perderse alguna que otra noche por Pachá. Llegan por la mañana en yate y se mueven en lancha hasta la orilla para tocar tierra, empaparse de arena y catar paella o caldereta. Siguiendo el manual del famoso formenterano, este fin de semana se han dejado caer por ahí Mar Flores y Javier Merino, con los dos hijos que tienen en común: Mauro, de nueve años, y Beltrán, de cuatro. Otros que se han bañado en aguas de Formentera son Gonzalo Miró y su novia, la cantante Amaia Montero.

Obregón, Zaldívar y amigos
Para rematar, Ana Obregón se citó allí para estrenar su cámara digital con Eva Zaldívar, ex mujer de Pepe Navarro. Zaldívar no dejó de hacerse arrumacos con su actual pareja, el cantante Juan Peña. Mientras, Obregón se dejaba ver con su habitual corte de acompañantes veraniegos de similar corte: jóvenes y atléticos.

Territorio comanche para los «paparazzi» que a lo largo de este verano también han retratado con sus objetivos a lo más granado del deporte: desde los tenistas Rafa Nadal y Juan Carlos Ferrero al piloto Sete Gibernau, sin olvidar a los futbolistas Fernando Torres, Guti y Piqué. También captaron la batalla de abdominales de de Álvaro Bultó –sin su actual novia, la miss Raquel Revuelta– y David Bustamante, así como los baños «hippies» de la Duquesa de Alba y su hija Eugenia Martínez de Irujo. La seducción de Formentera ha roto fronteras y desde la lejanía se han desplazado también Giorgio Armani, Ribery y Boris Becker.