Egipto

A salvo de miradas

A salvo de miradas
A salvo de miradaslarazon

Un mismo escenario pero distintas realidades. Si la playa de Alejandría es una foto fija de la vida cotidiana en Egipto, se puede convenir que conviven mujeres que siguen los códigos estéticos occidentales con otras féminas que difuminan su identidad bajo el «niqab», una prenda no demasiado bien vista ni por las autoridades ni por parte de la sociedad egipcia, ya que creen que es un síntoma de la progresiva islamización del país. Pero ahí está, compartiendo el mismo mar, idéntico día de playa pero no parecido baño. Porque la mujer a la que sólo se le ven los ojos, no se sabe si por elección o no, sale del mar protegiéndose de la mirada libidinosa de los hombres y desactivar así su deseo. Algunos argumentan que es una señal de respeto hacia la mujer, un afán de preservarla... Puede ser. Sin embargo, desde esta orilla del Mediterráneo se puede pensar que el respeto no pasa por ocultar su físico sino por mostrarlo sin sentirse amenazada.