Abel reabre las heridas

Madrid- Cuando Abel entró por primera vez en el vestuario del Atlético tenía la idea de pacificarlo. Se apoyó en los futbolistas españoles, dio la titularidad a Pablo y Antonio López para fortalecer el núcleo del equipo. Pero los planes le han fallado. Y alguno de los «jefes» de la plantilla ya se han revuelto contra él. Habían pasado sólo ocho minutos de la segunda parte en Do Dragão y Maxi se marchaba andando del césped. Poco importaba que el Atlético necesitara un gol para superar la eliminatoria contra el Oporto y que Forlán esperara en la banda para entrar en el campo con más de una hora de retraso. El enfado le podía al capitán, que entregó tranquilamente el brazalete a Simão para que se lo diera a Antonio López. Abel había conseguido con un cambio enfadar a dos. Aunque en realidad el cabreo de Forlán había empezado varias horas antes, cuando supo que no iba a ser titular. El técnico esperaba resolver la eliminatoria en la segunda mitad, pero entonces ya era tarde. Al uruguayo le faltaban ganas y al equipo le faltaba fútbol. Y los enfados no se frenaron ahí. Agüero estalló después del encuentro. «Yo pondría siempre a Forlán», dijo el «Kun». «Fue difícil asimilar su suplencia, Diego es un pilar fundamental del equipo», añadía el argentino. «Pero si a tres no nos gusta la alineación no podemos hacer nada». Y los tres están enfadados. Cada declaración del «Kun» es un paso más hacia su salida del Atlético. Se quejó en Almería del juego del equipo, cuando todavía entrenaba Aguirre. El miércoles se quejó del entrenador y lo más probable es que ninguno de los dos siga en el club el próximo año. Con el mexicano estaba dividido el vestuario, pero con Abel no ha mejorado la situación. Seitaridis, al que Aguirre perdonó demasiadas cosas, ya está apartado para siempre. Se entrena como uno más, pero nunca más volverá a ponerse la camiseta rojiblanca. Y Maniche puede seguir por el mismo camino. Discutió con el entrenador antes del partido y sólo disputó unos minutos. Nunca ha sido titular con el nuevo técnico y por si acaso ya ha avisado. En una entrevista concedida a la agencia Efe avisaba el lunes de que su suplencia podía deberse a los problemas que tiene con el club para cerrar la renovación. «No quiero pensarlo», decía. Pero lo piensa.