Casa Balbino: los camarones del presidente

Durante la Feria cuesta hacerse con una mesa de las que pueblan el Cabildo. No digamos llegar a la barra. Por eso, aproveche estos días de playa y caña, y, mientras otros ven las carreras de caballos a orillas del Guadalquivir, cuélese en Casa Balbino para hacerse una ronda de tapas, de esas que entran sin esfuerzo y que se pueden ajustar a la cintura llegado el otoño.Manzanilla y tortillita de camarones cató Rodríguez Zapatero cuando el pasado verano se dejó caer por este rincón de Sanlúcar de Barrameda durante sus vacaciones en Doñana. Acertó con el clásico de la casa, del que no esconden la receta: una capa de masa que se hace invisible con algo de cebolla y perejil, camarones por doquier y el baño justo en la sartén para que estén crujientes hasta rabiar. Del mar y la huertaBocado de presidente, pero también del turista, del sanluqueño de a pie y de los chipioneros, a quienes no les cuesta reconocer el arte en la cocina de sus vecinos. A los hermanos Izquierdo Guzmán, segunda generación de Casa Balbino, no les hacía falta el empujón zapateril para ser un referente en Cádiz. Lo mismo cautivan con un adobo de lo más jugoso que con unas papas «aliñás» que desaparecen del plato a velocidad de vértigo. Hasta sus compañeros hosteleros les reconocieron en 2008 como Empresarios del Año por su buen hacer en un local abierto en 1939, después de que la familia decidiera reconvertir en taberna la tienda de ultramarinos especializada en vino tinto y café. Ahora, en las pizarras de la pared, junto a las cabezas de toros, el mar y la huerta se entremezclan para ofrecer lo mejor del Bajo Guía: el salmorejo, las caracolas, el jamón, las ortiguillas... ¡y los langostinos, no se olviden! Los mismos que crecen entre el agua dulce del Guadalquivir y la sal del Atlántico, esos que se toman igual cocidos que como relleno de berenjenas.El resto de la carta salta a la vista en la vitrina junto a la barra: corvina, chocos, acedías, cañaíllas y almejas. Todo fresco, como lo puede comprobar antes o después en el mercado de abastos, a tres minutos no más. Pero no se vayan todavía de Casa Balbino, que aún queda manzanilla para regar otra ronda más sin que el bolsillo se resienta. El flotador, tal vez.

Para no perderseDirección: Plaza del Cabildo, 1. Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).Tel: 956 360 513. Precio medio: 30-35 euros.Plato estrella: la tortillita de camarones, sin duda. Tarjetas: admite todas.Prestaciones: terraza, aunque cuesta encontrar mesa libre.Días de cierre: ninguno.