El problema de eternizar las fiestas

Operativos de seguridad y limpieza que se ponen en marcha varios días antes de la celebración y que se alargan después hasta la saciedad, fiestas que se salen de lo que marca el calendario litúrgico, problemas de tráfico, costes que se disparan... Desde hace varios años, los grandes festejos de la ciudad no duran lo que marca la tradición. Este año, la Delegación de Fiestas Mayores ha dado una nueva vuelta de tuerca anunciando que la ornamentación de los escaparates y calles del recorrido del Corpus Christi se mantendrá hasta el fin de semana posterior a la procesión. La Semana Santa y la Feria tampoco se escapan de esta dinámica.

Semana Santa
Desde hace más de una década el fenómeno de la Semana Santa se ha desbordado. En este caso, el hecho no es imputable al Ayuntamiento, que siempre se ha mostrado dispuesto a colaborar con las cofradías, como en el caso del desmontaje «in extremis» de las catenarias este mismo año o la apertura de la calle San Fernando en 2006. El Viernes de Dolores, dos días antes del comienzo oficial de la Semana Mayor, ya hay cofradías en los barrios, por lo que la Policía Local se ve obligada a movilizar a decenas de agentes para controlar el tráfico.
La anterior junta superior del Consejo intentó poner coto a este asunto incorporando a dos cofradías a la nómina de las que procesionan a la Catedral. No obstante, es complicado circunscribir todas las procesiones a los días de Pasión y al entorno del centro por la saturación existente. Una solución, comentada en varios ámbitos cofrades, sería organizar las salidas de las hermandades de los barrios durante los días de Semana Santa en sus propios entornos, aunque no se dirijan a la Catedral.

Feria
Tras el vacío registrado este año en el Real durante el último fin de semana de la fiesta, el Ayuntamiento ha planteado la posibilidad de limitar la actividad durante los días previos al «alumbrao». Dese hace varios años, en el recinto de Los Remedios ya no sólo se dan cita propietarios de casetas para dar los últimos retoques a las instalaciones varios días antes de la inauguración oficial, sino que se celebran los primeros almuerzos y encuentros familiares.
Ante la masiva afluencia de personas, el Cecop activó el dispositivo especial dos días antes de lo habitual. Los operarios de Lipasam también comenzaron a trabajar antes del lunes del «pescaíto», ampliando las jornadas de 18 a 35 horas. El Ayuntamiento se vio obligado a aumentar el presupuesto del dispositivo en más de 34.000 euros. Sin embargo, el Consistorio sería uno de los primeros organismos que tendría que limitar sus actos oficiales durante los prolegómenos e incluso articular alguna medida, como la limitación del suministro eléctrico, para que el Real no sea ya una fiesta antes del pistoletazo de salida.

Corpus Christi
La atracción de turistas nacionales es el argumento esgrimido por la delegada de Fiestas Mayores, Rosamar Prieto-Castro, para justificar el «estirón» que sufrirá este año la celebración del Corpus Christi, tradicionalmente circunscrita a la víspera, al jueves de la procesión y al domingo, cuando salen las procesiones eucarísticas en los barrios. Los exornos de las calles, balcones y escaparates se mantendrán para intentar atraer a visitantes y compradores en estos tiempos de crisis.