«IU no se atreverá a echar a los ocupas de la Puerta de la Carne»

SEVILLA- Los vecinos del Pumarejo, que han sufrido durante cinco años la presencia de los ocupas en el Centro Social Ocupado y Autogestionado (CSOA) Casas Viejas, aseguran que la actividad de la asamblea se ha trasladado al antiguo mercado de abastos de la Puerta de la Carne.

El portavoz de la Asociación de Vecinos y Comerciantes del Pumarejo, Ángel López Hueso, instó ayer a los vecinos de San Bernardo a «ponerse manos a la obra» para hacer frente a «lo que se les viene encima». López Hueso recordó que el antiguo mercado es de titularidad municipal –a diferencia del recinto del Pumarejo, de propiedad privada– por lo que advirtió que «ahora tienen el amparo de IU y, como IU está en el Ayuntamiento, tendrán en el mercado su refugio permanente.

«Nadie les va a tocar»

«Ellos amenazaron diciendo que por cada desalojo harían una ocupación y ahora han ubicado su sede en lo que iba a ser un centro cívico», señaló, al tiempo que se mostró convencido de que «en San Bernardo va a ser más difícil echarlos y ellos están contentísimos porque saben que nadie les va a tocar».

El líder vecinal consideró que la clave de un futuro desalojo pasa por la reorganización del vecindario, ya que «en el Pumarejo era más difícil que se quedaran porque los vecinos siempre estábamos quejándonos». Además, recordó que en el desalojo del inmueble se personaron Antonio Rodrigo Torrijos, portavoz de IU y primer teniente de alcalde, Francisco Manuel Silva, concejal de IU y delegado de Juventud y Deportes, Luciniano Rodríguez, director del Casco Antiguo y el histórico Diego Cañamero, por lo que consideran probada la sintonía entre la coalición de izquierdas y el colectivo ocupa.

Asimismo, los vecinos del Pumarejo alertaron ayer de la aparición en este barrio sevillano de carteles que anuncian la celebración de la fiesta «Casas Viejas se pone flamenca», el próximo día 31, en el antiguo mercado de la Puerta de la Carne.

«Macrofiestas» de Nochevieja

«Son los mismos carteles de fiestas de otros años pero convocando ahora en la Puerta de la Carne», aseguró López Hueso, quien advirtió de que «la macrofiesta de fin de año con 3.000 ó 4.000 personas no se las va a quitar nadie». Hueso recordó que en la antigua sede del colectivo, las fiestas congregaban «entre 2.000 y 3.000 jóvenes». En este sentido, el portavoz vecinal apuntó que «ya se sabía que no se iban a quedar quietos y han buscado una parcela grande, tienen montada hasta una antena parabólica en el antiguo mercado».

Asimismo, señaló que «los vecinos han arrancado los carteles» aparecidos en las calles del Pumarejo y deseó a los habitantes de San Bernardo «que pasen unas felices fiestas y que aguanten ahora lo que nosotros hemos aguantado durante todos estos años, pues llevamos sufriendo desde el 2002».

Por su parte, el colectivo ocupa de Casas Viejas volvió a negar cualquier conexión con los inquilinos de la Puerta de la Carne. «No sabemos nada del mercado», mantuvo José García, uno de los portavoces del colectivo. «Cuando ocupamos un lugar, lo reivindicamos», añadió, a la vez que matizó que «no estamos ni en contra ni a favor de la ocupación del mercado, pero no conocemos nada ni a nadie».

García negó el «traslado» de la infraestructura y las actividades de Casas Viejas a la Puerta de la Carne, así como la preparación de una fiesta de Nochevieja. Del mismo modo, recordó que «no hay más actividad en estas fechas de Navidad, de hecho ésta decae porque cada uno se va con su familia».

El martes pasado, los vecinos de la zona adviertieron que el movimiento en torno al antiguo mercado ha aumentado desde el desalojo de Casas Viejas. Algunos incluso mantuvieron que la cifra de moradores podría rondar los cuarenta. El inmueble lleva ocho años cerrado y los ocupas sólo habitan la parte alta de este edificio municipal.