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La crisis reduce un 12% los beneficios de la banca en 2008 y dispara la morosidad al 24%

La patronal de la banca prevé que los resultados de este año serán "menos buenos"y que las entidades deberán adaptarse a la nueva realidad

El presidente de la Asociación Española de Banca, Miguel Martín
El presidente de la Asociación Española de Banca, Miguel Martínlarazon

La crisis no ha pasado de largo para la banca española. Durante el ejercicio 2008, ganó 16.603 millones de euros, lo que supone un descenso del 12% respecto al beneficio obtenido el año anterior. Y es que, según los datos presentados hoy por el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, estas entidades financieras destinaron a insolvencias y dotaciones 15.725 millones de euros. Además, presentaron una morosidad del 2,4%. Con respecto a las previsiones para el presente ejercicio, la patronal prevé que los resultados "serán menos"buenos y que las entidades financieras tendrán que adaptarse a esta nueva realidad. El presidente de la patronal calificó estos datos de "buenos y recurrentes", puesto que se han obtenido "en el año del colapso del sistema financiero internacional". Por ello, a su juicio, los bancos españoles "han logrado capear el temporal y sobrevivir a la tormenta mientras que muchos de sus rivales no han podido hacerlo". Según los datos presentados hoy, los créditos a la clientela crecieron un 6,9%, hasta los 1,29 billones de euros mientras que presentaron una morosidad consolidada estimada del 2,4%, frente a la del 1% de finales de 2007. Todo ello, con unos fondos de cobertura que equivalen al 91% de los préstamos dudosos, mientras que un año antes suponían el 190%. En términos individuales, la mora es del 2,81%, frente a la del 0,76% del ejercicio precedente, y la cobertura es del 82%. Por su parte, el margen bruto alcanzó en 2008 63.306 millones, lo que supone un 10% más que el ejercicio anterior. Mientras, el margen de explotación retrocedió un 16,4% y se estableció a 19.945 millones. Los depósitos a la clientela aumentaron a un ritmo del 13,9%, hasta 874.550 millones de euros, y los ingresos netos por comisiones cayeron un 7,6%, hasta 7.043 millones. "Los bancos presentan una situación sólida y un enorme margen para absorber dotaciones", aseguró el presidente de la AEB al señalar que más del 45% de los créditos tienen garantía hipotecaria. Además, gozan de una buena capitalización, ya que con un 8,42%, es mayor que la de los competidores europeos y norteamericanos antes del proceso de inyecciones de capital público por parte de los estados.

"LOS BANCOS SABRÁN ADAPTARSE" Además, Martín recalcó que la banca española ha logrado sortear el temporal actual al sustituir la financiación que antes se obtenía en los mercados por la del Banco Central Europeo (BCE) y realizando emisiones de pagarés a corto plazo y con la captación de depósitos de clientes. Y es que según el presidente, a escala interna, ha acometido fuertes dotaciones para provisiones e insolvencias, pero aún cuenta con una cobertura holgada en comparación con los estándares europeos, de entorno al 50%. Además, al mismo tiempo mantiene los "colchones de capital"por encima de los mínimos regulatorios, aseguró. Entre los planes para el actual ejercicio, Miguel Martín señaló que el principal objetivo de la banca debe ser adoptar aquellas estrategias que le permitan prepararse para competir en un "escenario radicalmente diferente". Para el presidente de la patronal, la resolución de la crisis va a implicar un cambio profundo en el sistema financiero mundial, aunque confió en que "los bancos españoles sabrán"adaptarse a la nueva realidad. No obstante, no quiso hacer ninguna previsión sobre los resultados que los bancos españoles obtendrán a lo largo de este año. Unicamente pronosticó que serán algo menos positivos que los de 2008. "No espero que sean tan buenos, pero espero que se aproximen todo lo posible", sostuvo Martín antes de advertir que la recesión económica y la crisis económica se mantendrán tanto en 2009 como en 2010. Por ello, recordó que estas entidades afrontan importantes retos, como la continuación del cierre de los mercados financieros mayoristas, que dificultan una adecuada estructura de financiación; una caída de los ingresos por la menor actividad económica; el incremento de la morosidad; y el profundo ajuste en el mercado inmobiliario.