Cataluña

Las verdaderas claves del nuevo modelo de financiación

Las verdaderas claves del nuevo modelo de financiación
Las verdaderas claves del nuevo modelo de financiaciónlarazon

MADRID- No crean nada de lo que oigan o lean. Cataluña dice que tendrá 3.850 millones del total de los 11.000 adicionales que pone el Estado para la financiación autonómica, pero nadie sabe de dónde sale el cálculo. Y es que el documento, de 50 páginas, remitido por Economía a las comunidaes autónomas, tiene mucha literatura, poca concreción y mucha fórmula matemática para que cada cuál haga sus cálculos en función de una serie de variables y de una estimación aproximada de ingresos vía impuestos. Total: que es imposible saber cuánto dinero corresponderá a cada autonomía hasta que no se haga la liquidación por ingresos tributarios que se realiza una vez cerrado cada ejercicio. Así que no es de extrañar que quienes entienden de fórmulas matemáticas, curvas económicas y estadísticas hablen de una bomba de relojería que en dos años podría estallar cuando las autonomías no recauden lo estimado y llamen a la puerta de «papá» Estado para pedir más.

 

Éstas son las principales quejas:

 

Un modelo irreal e inoportuno. Los datos con los que Economía ha redactado el nuevo modelo de financiación son de 2007, un año en el que la recaudación del Estado era mucho mayor que hoy, y en el que la economía crecía por encima del 3 por ciento. Las estimaciones realizadas, por tanto, son irreales. Más claro: gastaremos como si tuviéramos las arcas del Estado tan llenas como hace dos años y como si la economía no se hubiera desplomado. Conclusión: más déficit y más deuda pública.

 

Penaliza las rebajas de impuestos. Sostienen los expertos que el modelo castiga el pasado, el presente y el futuro de aquellas comunidades que han rebajado los impuestos, en especial a quienes eliminaron el Impuesto de Sucesiones. Y es que uno de los cálculos para el reparto se realiza en función de los impuestos propios que recaudan las autonomías. Así, el modelo penaliza a las que menos impuestos tengan y premia a las que suban los tributos. Es el cómputo para acceder al llamado fondo de competitividad, lo que el portavoz en Economía del PP, Álvaro Nadal, llama «fondo para ricos».

 

Insolidario. El sistema es insolidario porque el 80 por ciento del gasto (Sanidad, Educación y Servicios Sociales) está igualado entre todas las Comunidades, pero el 20 por ciento restante se recibe en función de lo recaudado por cada Comunidad. Es este dinero el que se destina a infraestructuras, medio ambiente, seguridad... a la competitividad.

 

El Gobierno se desprende de la dependencia. Los 11.000 millones adicionales a los 114.000 que ya ponía el Estado se desembolsan a cambio de que el 100 por ciento del coste de la dependencia pase a las autonomías. Esto supone que las comunidades que tengan más dependientes reconocidos tendrán más dinero.

 

El fin de la política fiscal. Desde ahora el Estado es socio minoritario en impuestos especiales y paritario en IVA e IRPF, por lo que cualquier reforma fiscal se antoja imposible para cualquier Gobierno.