Los Ulen vuelven a reírse de la crisis

Lo de Los Ulen es una auténtica filosofía vital: «No hay nada más trágico y divertido que reírse en un velatorio. El humor es un escape a lo terrible de la vida». Y es que Pepe Quero, director de esta irreverente compañía de teatro que lleva desde 1986 provocando las carcajadas del público, lo tiene claro. Lo hilarante es salud.Ya van trece años desde que hicieran su primera aparición los tres entrañables mendigos Morci (Maite Sandoval), Mosta (Paco Tous) y Lombri (Quero), en una obra que cosechó tal éxito que se mantuvo en cartel cinco años. Hoy vuelven con «Maná Maná. El regreso. (Una crónica de parias)». Pero no todo sigue igual; según ellos, están «mucho más guapos y mejores actores». A Sandoval incluso le gusta más el «Maná Maná» de ahora: «Es más potente, con un tono oscuro y amargo».Indigentes de aúpaPero, ¿a qué viene tanto alboroto? La intérprete explica: «La obra trata del transcurrir de un día en la vida de unos pobres, entra en su mundo». Pero no son unos mendigos cualesquiera: «No están estereotipados, son únicos y muy personales», cuenta la actriz, «hasta el punto de que la gente se muere risa, pero acaba diciendo "Dios mío, ¿de qué me he reído?", porque lo que contamos es duro, realmente tragicómico», dice. Aseguran que si tienen una finalidad es la de ser la voz de aquellos «que no miramos porque no son cómodos, huelen mal y escupen», comenta. Paradójicamente, la realidad se ha unido a la ficción en este contexto actual de crisis mundial, y esta obra está hoy más al día que en 1996. «La gente se divierte, pero hay algo visceral y real en ello», según Tous. Aunque su regreso no responde al criterio comercial: «Parece que lo hemos hecho aposta, y para nada. Responde al deseo de volver a trabajar entre amigos», explica Quero.