Nuevos datos avalan que el secuestro de un jardinero en Madrid fue obra de ETA

MADRID- Los investigadores han obtenido en las últimas semanas nuevos datos que avalan que el intento de secuestro de una persona, que fue confundida con un concejal, es obra de ETA. Según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas, se conocen otros detalles de lo que ocurrió en el momento en que esa persona, jardinero de profesión y que se encontraba de baja médica, fue interceptado por tres individuos que se identificaron como miembros de la banda criminal. Los hechos, tal y como publicó en primicia este periódico, ocurrieron en septiembre del año pasado.

La citada persona paseaba por las proximidades de la Universidad de Tres Cantos, en Madrid, cuando dos individuos, que iban armados, le obligaron a que subiera a bordo de una Renault Scenic en la que estaba una mujer. Allí comprobaron, mediante el cotejo de la fotografía (se supone que de un concejal de la zona o que vive en algunas de las localidades próximas) que se habían equivocado. Después, según la versión que se conoció entonces, le dejaron abandonado en un lugar cercano, donde fue encontrado por una patrulla de la Guardia Civil en un estado de gran nerviosismo. Los detalles conocidos ahora coinciden plenamente con la forma de actuar de ETA en este tipo de situaciones. Desde el primer momento, los investigadores dieron credibilidad a lo que contaba el jardinero, dado que es una persona seria que no tenía motivos para mentir.

Según su versión, todos los días caminaba algunos kilómetros por prescripción médica y solía hacerlo por la zona en la que se produjo el secuestro. Los individuos que le interceptaron no tenían acento extranjero sino que hablaban español correctamente. El hecho de que hasta el momento no se haya podido localizar el vehículo, una Renault Scenic negra, según la víctima, ha complicado las pesquisas. El reciente hallazgo de un «zulo» de ETA en la localidad madrileña de Cercedilla, en el que había una pistola con silenciador, ha sido tenido en cuenta por los investigadores. En estos días se ha cumplido el aniversario del secuestro y asesinato del concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco Garrido. Con posterioridad, se supo que ETA lo intentó de nuevo en Andalucía y el País Vasco. Este tipo de acciones criminales, por su maldad y repercusión mediática, pueden ser utilizadas por la banda en momentos de gran debilidad operativa, como el que atraviesa en los últimos años gracias a la efectividad de las Fuerzas de Seguridad.