«Nunca me siento solo» insiste el Papa en su cuarto aniversario

Ayer se cumplían cuatro años de la elección de Benedicto XVI a la Cátedra de San Pedro. Un Pontificado que está poniendo de manifiesto su gran carisma a través de la profundidad de sus discursos, homilías y catequesis, que, como ha considerado Federico Lombardi, director de la sala de prensa del Vaticano, «permanecerán para la posteridad como patrimonio del pueblo cristiano». Sin embargo, el Pontificado de Benedicto XVI también está cargado de polémica por las críticas que recibió al decidir levantar la excomunión al obispo lefebvriano que negó el Holocausto nazi, o por sus declaraciones durante su viaje a África sobre el uso del preservativo en este continente. A pesar de ello, el Santo Padre reiteró ayer que «nunca se siente solo» y agradeció las muestras de «afecto y cercanía espiritual» recibidas desde todo el mundo con motivo de su 82 cumpleaños, el pasado jueves, y del aniversario de su Pontificado. De hecho, confesó que «en esta particular semana, he experimentado la comunión que me rodea: una solidaridad espiritual, que se manifiesta de mil maneras», y destacó la importancia de que la Iglesia permanezca unida: «Desde mis colaboradores de la Curia Romana, hasta las parroquias geográficamente más lejanas, los católicos formamos y debemos sentirnos como una sola familia, animada por los mismos sentimientos de la primera comunidad cristiana», explicó durante el Regina Coeli, el rezo que sustituye al Ángelus en el tiempo de Pascua. Por otro lado, el Pontífice pidió una «acción firme y concreta» en el ámbito internacional para «prevenir y eliminar toda clase de discriminación e intolerancia», de cara a la Conferencia sobre el Racismo de las Naciones Unidas que comienza hoy en Ginebra. «Es necesaria una vasta obra de educación que exalte la dignidad de la persona», afirmó.