Pura música

Transcurrido el primer impacto y analizado el fondo de la cuestión, llega uno a la conclusión de que las propuestas de Zapatero son pura música. La de las pymes porque no puede ser más intervencionista y encorsetada. La de los coches, siendo la mejor, porque el mal ya está hecho para el mes de mayo: hasta junio no se venderá un solo carro. Y la de la vivienda por incomprensible. Tenía razón Rajoy ayer en su análisis: lo que hay que hacer con la vivienda es incrementar las deducciones. Pensar que vamos a cambiar el modelo productivo de la noche a la mañana es de ilusos. Creerse que una economía occidental desarrollada puede funcionar sin la construcción es no saber dónde vivimos. En todas las economías que crecen es fundamental este sector puntero, que tira de los demás. Si va mal es imposible que vaya bien la economía. Aquí y en China y en Filipinas. Está claro que hay que evitar la corrupción y los abusos de otras épocas, en muchos casos promovidos por administraciones municipales socialistas. Pero nadie puede pensar que es posible reactivar la economía teniendo deprimida la construcción. Por eso lo que hay que hacer es lo contrario de lo que se dijo: aumentar las deducciones generalizadas, favorecer de nuevo la desgravación por la segunda vivienda y olvidarnos de parches como el que el martes descubrió nuestro impresionante Rodríguez Zapatero.