Reventa en internet: al margen de la ley

B arcelona batió ayer el récord en rapidez de venta de entradas. Se despacharon en 54 minutos las 90.000 localidades que completan el aforo del Camp Nou de Barcelona para asistir el 30 de junio al primer concierto de U2 de su gira «360º Tour». Numerosos «fans» de la banda irlandesa se quedaron sin las preciadas localidades, pero que no se preocupen, ahora comienza el trapicheo de entradas en la reventa. Visto el negocio de la venta de tickets para todo tipo de espectáculos a través de la red, han comenzado a surgir plataformas «online» que conforman el mercado secundario. Si las entradas que se han vendido hasta ahora para el concierto de U2 oscilaban entre los 30 y los 150 euros, en la reventa ya alcanzan los 700, sin contar las comisiones que cobran por sus servicios. Entorno seguro Con estos incipientes negocios en nuestro país sale a la luz la dudosa legalidad de estas prácticas sancionadas desde 1982 por real decreto. Sin embargo, la versión de las empresas que realizan esta actividad en la red es diferente: «Nosotros ofrecemos un entorno seguro para el intercambio de entradas, somos únicamente intermediarios, la reventa la realizan los usuarios, no la empresa, son ellos los últimos responsables de las actividades realizadas en nuestra web», comenta a LA RAZÓN Rafael Ortiz, responsable de marketing y ventas de Seatwave en España, una empresa que acaba de aterrizar aquí y que viene avalada por su éxito en Gran Bretaña. Ayer mismo ya ofrecían en su portal entradas para el concierto de U2 entre los 114 y los 600 euros. Tengoentradas.com es otra de las empresas que se dedica a este negocio en nuestro país. Esta página, que se define como «lugar de encuentro entre particulares», ofertaba ayer entradas por 120 euros las más baratas y 700 las más caras. El modus operandi de las empresas de reventa online es bastante curioso: «No establecemos tarifas por la inserción del anuncio de venta de entradas, tan sólo cobramos una comisión del 10% al vendedor, un 15% al comprador y nueve euros en concepto de gastos de envío», comenta el portavoz de Seatwave. Conflictos jurídicos Diferentes fuentes judiciales coinciden en que el marco alegal en el que se encuentra la reventa por intertet permite que esta compra-venta se lleve a cabo libremente. «Hasta que no se prohíba de manera explícita la reventa a través de la red, seguirá funcionando impunemente», indican desde el gabinete jurídico de la Asociacion de Internautas. En el artículo 67 del Real Decreto por el que se aprueba el Reglamento General de Policía de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas se explica que la venta y reventa callejera o ambulante de localidades queda terminantemente prohibida y establece una multa para quienes hagan uso de esta práctica. Esta ley no ha sido adaptada a nuestros días, y por ello surgen conflictos jurídicos. «Yo entiendo internet como un medio de comunicación más y por lo tanto igual de penalizables son las prácticas ilegales que se realizan en él. No se debe confundir el medio con la comisión del delito», afirma a este diario Ofelia Tejerina, de la Asociación de Internautas. Por otro lado, Óscar Bello, de Entradas.com, señala que al no estar prohibida explícitamente la actividad del mercado secundario, su trabajo es legal: «Seguro que dentro de unos cuantos años esta práctica será legal». Estos negocios virtuales aportan una serie de garantías al consumidor, como son la devolución del dinero si por algún motivo no se puede disfrutar del espectáculo e incluso no realizan los movimientos económicos hasta que no se haya disfrutado del concierto. «En Seatwave se aporta una total protección a los usuarios, tanto a compradores como a vendedores», asegura Rafael Ortiz. «El problema es que la garantía debe ofrecerla el propio promotor del concierto, no el intermediario», rebaten desde la Asociación de Internautas. «Si esta práctica pudiera realizarse abiertamente no se harían las artimañanas que estamos tan acostumbrados a ver, pero tengo opiniones encontradas. Por una parte, lo veo como el que compra un piso y luego lo vende a mayor precio, pero por otra observo que con estos métodos el promotor y el artista quedan desprotegidos», afirma el director general en España de Ticktackticket. La OCU no tiene información al respecto, pero lo cierto es que hasta ahora no existe niguna jurisprudencia en nuestro país sobre ello y estas prácticas continúan realizándose y con gran éxito entre el público, que no duda en acudir a estos medios para hacerse con la entrada que desean, cueste lo que cueste.