Estados Unidos

Una funcionaria trabajó con Garzón durante su permiso en Nueva York

Una funcionaria trabajó con Garzón durante su permiso en Nueva York
Una funcionaria trabajó con Garzón durante su permiso en Nueva Yorklarazon

madrid- Los estudios que el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón realizó en Nueva York, y para los que obtuvo la correspondiente licencia del Consejo General del Poder Judicial, precisaban, al parecer, de la colaboración de una auxiliar administrativo que le ayudase en las diversas tareas relacionadas con los mismos. Por ello, contó desde mayo a diciembre de 2005 en la capital neoyorkina con una funcionaria de Justicia que, a su vuelta, se reincorporó al Juzgado de Instrucción número 38 de Madrid, según confirmaron a LA RAZÓN fuentes jurídicas. No permaneció con el juez los seis meses que éste prorrogó su estancia en la capital neoyorkina. La funcionaria se trasladó a Estados Unidos tras obtener de la Comunidad de Madrid la correspondiente «licencia de estudios universitarios» para ejercela a Nueva York. En ese tiempo, durante el cual mantuvo su sueldo de unos 900 euros mensuales, estuvo como apoyo al juez Garzón, que abonó la comunidad al tener transferidas las competencias personales y materiales. Investigación Durante el tiempo en que el juez Garzón estuvo «a nómina» de la Universidad de Nueva York y percibió del centro un total de 203.000 dólares -según el magistrado, se trataba de una cantidad «bruta»-, que no declaró al Consejo General del Poder Judicial. Esta circunstancia fue puesta de manifiesto por el Tribunal Supremo en el auto donde archivaba una querella por prevaricación contra el juez Garzón, por haber cobrado, presuntamente, de una entidad financiera 1,7 millones de dólares para que adoptara una determinada decisión en una causa contra la citada entidad. Junto al archivo, el Supremo remitió al CGPJ, «a los efectos oportunos» , todo lo relativo a esos pagos por el centro académico neoyorkino. El Servicio de Inspección del Consejo la pasada semana unas diligencias previas para investigar lo denunciado por el Supremo, el cual aludía a la posible comisión de una falta disciplinaria muy grave consistente en «faltar a la verdad en la solicitud de obtención de permisos». El magistrado, por su parte, aseguró que esa investigación «no tiene fundamento» y que las cuentas están muy claras. ¿Y sabe cómo quedan claras?: declarando al fisco dos veces, una a la norteamericana y otra a la española».