Alemania reducirá los controles fronterizos a partir de este sábado

Alemania levantará los controles fronterizos a partir del sábado con la perspectiva de eliminarlos completamente el 15 de junio. Un pronóstico que dependerá de la evolución de la pandemia y que supone la primera flexibilización de los controles en las fronteras impuestos por Berlín a mediados de marzo, tanto en el tráfico terrestre como el aéreo y marítimo, y que afectan a la llegada de pasajeros a través de las fronteras con Austria, Suiza, Francia, Luxemburgo y Dinamarca, así como a los procedentes por vía aérea de Italia y España. No hay cambios en las fronteras con Polonia y la República Checa.

El primer paso para el alivio será en las fronteras con Francia, Suiza, Austria y Dinamarca, donde se realizarán controles solo puntuales -anunció hoy el ministro del Interior, Horst Seehofer- en lugar de los sistemáticos actuales. Por su parte, los controles para los pasajeros procedentes, vía aérea, de España e Italia se mantendrán en esa primera fase, a la espera de cómo evolucione la pandemia en esos países.

“La perspectiva es lograr la reapertura total el 15 de junio, si la evolución de los contagios lo permite”, avanzó el ministro. Para ello debe conseguirse no solo la contención actual de estos, sino también que se respete “la disciplina” en materia de higiene, distancia social y demás normas generales frente a la pandemia.

Los controles fueron implantados a mediados de marzo con estos países, aunque se mantenían abiertas las fronteras para el paso de mercancías, trabajadores en países vecinos u otros casos puntuales. Una decisión a la que se sumó la recomendación del Gobierno de Angela Merkel a sus ciudadanos de no viajar a ningún país del mundo y que, en principio, seguirá vigente hasta el 14 de junio, lo que sumió en la incertidumbre a buena parte de la población alemana, que vio en vilo la posibilidad de celebrar sus vacaciones como de costumbre.

Según el periódico “Bild”, Merkel telefoneó a principios de semana al canciller austriaco, Sebastian Kurz, y al presidente francés, Emmanuel Macron, para tratar de acelerar esta decisión. Desde hace días, era palpable la intención de la canciller de levantar gradualmente esas restricciones.

No obstante, y tal como aseguró este miércoles en el Parlamento alemán, Merkel instó a “no arriesgar” lo conseguido y señaló que “la pandemia estará con nosotros por algún tiempo”. Recordó que los controles se reimplantaron a mediados de marzo, como “medida temporal” para contener al coronavirus. Se establecieron estas restricciones “de acuerdo con el proceder” de los socios de la Unión Europea y atendiendo a la “reciprocidad de las medidas” que en estos se establecían para combatir el Covid-19.

Presión de los Estados

Varios Estados federados alemanes apremiaron asimismo a que se alivien las restricciones a los viajeros, incluida la cuarentena a que debe someterse cualquier ciudadano que ingresa en el país. En Alemania están obligados hasta ahora a cumplir una cuarentena de catorce días a todos aquellos viajeros que entran en el país, aunque se prevén algunas excepciones para quienes hayan estado menos de 72 horas en el exterior.

Según Seehofer, esta norma se mantendrá para los viajeros procedentes de terceros países y se espera que se levante “progresivamente” y “de común acuerdo” entre los países de la Unión Europea.

Alemania ha estabilizado su nivel de contagios, con un índice de reproducción del coronavirus algo por encima del 1. El Instituto Robert Kock (RKI), competente en la materia, ha verificado hasta ahora 171.306 casos, con 148.700 pacientes recuperados, mientras que la cifra de fallecidos es de 7.634. Con ello Alemania se sitúa ahora en octava posición a escala mundial en cuanto a contagios, tras EE. UU., Rusia, España, Reino Unido, Italia, Francia y Brasil.