Reino Unido alcanza con Japón su primer gran acuerdo comercial post Brexit

El Gobierno británico cerró este viernes con Japón un acuerdo de libre comercio, el primero de relevancia en la era post Brexit, con el que espera reforzar la economía del Reino Unido en unos 15.000 millones de libras (16.090 millones de euros). La responsable de Comercio Internacional Liz Truss señaló que se trata de un “momento histórico”.

Sin embargo, el pacto llega en medio de la gran tormenta diplomática que se está viviendo actualmente con Bruselas. El comercio de Londres con Tokio representa solo el 2% del total del Reino Unido, por lo tanto, el aumento esperado del PIB del 0,07% a largo plazo representará tan sólo una pequeña fracción de todo lo que podrían perder ahora los británicos al salir del bloque.

El divorcio político con Bruselas consiguió ser ordenado gracias al Acuerdo de Retirada que se firmó el año pasado. Sin embargo, el premier Boris Johnson ha presentado esta semana un polémico proyecto de ley de Mercado Interno que viola ahora este tratado internacional.

La UE le ha dado de plazo hasta finales de este mes para retirarlo. Si no lo hace, las actuales conversaciones que mantienen Londres y Bruselas para cerrar un pacto comercial podrían saltar por los aires. Y de llegar a tal escenario, una vez acabe a finales de diciembre el periodo de transición y los británicos salgan ya a efectos prácticos del bloque, las relaciones entre ambas partes se regirían únicamente para las pautas de la Organización Mundial del Comercio. Eso supone cuotas y aranceles, en definitiva, Brexit duro económico.

En este sentido, por más que ayer el Ejecutivo de Boris Johnson quisiera vender el pacto con Japón como hito, el ambiente entre los empresarios no es especialmente de júbilo. Adam Marshall, director general de la Cámaras de Comercio Británica, señaló: “Si bien este acuerdo es indudablemente un motivo de celebración, asegurar un acuerdo de libre comercio con la UE sigue siendo fundamental para el futuro de las empresas en el Reino Unido. Instamos a los ministros a redoblar sus esfuerzos para lograr una asociación integral con nuestro mayor socio comercial en un momento crucial de las negociaciones”.

Los propios líderes empresariales japoneses han expresado su preocupación por el impacto potencial de un Brexit duro económico a finales de año. Cerca de 1.000 empresas japonesas que emplean a 180.000 personas tienen presencia en el Reino Unido, incluidos los principales empleadores como Nissan, que cuenta con 6.000 empleados en su planta de fabricación de automóviles en Sunderland (Inglaterra).

En el marco del pacto entre Londres y Tokio, que por cierto bebe del alcanzado entre Japón y la UE el año pasado, el país asiático permitirá que un 99 % de las exportaciones británicas al país se beneficien de un comercio exento de tarifas.

También respaldará las inversiones de la industria automotriz “a través de tarifas reducidas en las piezas procedentes de Japón, procedimientos simplificados y una mayor seguridad jurídica para sus operaciones”, señaló el ministerio de Comercio sin dar más detalles sobre uno de los puntos de mayor importancia para Tokio.

Bajo el acuerdo logrado por Japón y la UE, el área comunitaria se comprometió a eliminar gradualmente los aranceles del 10 % que pesan sobre las exportaciones de automóviles japoneses para 2026. Japón es el decimotercer mercado de exportación de bienes más importante del Reino Unido y representa aproximadamente el 1,9% de todos los productos vendidos en el extranjero el año pasado, según los datos de la Oficina Nacional de Estadística.

Incluyendo el comercio de servicios, las importaciones y exportaciones supusieron un total de 31.6 mil millones de libras el año pasado, con 9.500 empresas con sede en el Reino Unido exportando bienes a Japón. Según el Departamento de Comercio Internacional, el acuerdo comercial aumentará ahora el Producto Interior Bruto del Reino Unido en un 0,07%, o lo que es lo mismo, 15.000 millones de libras, después de 15 años.

Por su parte, la UE es el mercado de exportación más grande del Reino Unido y representa el 46% de las exportaciones de bienes británicos. Incluyendo el comercio de servicios, las importaciones y exportaciones entre Londres y Bruselas supusieron un total de 672.5 mil millones de libras el año pasado, más de 20 veces el valor del comercio entre el Reino Unido y Japón.

Pese a que a principios de agosto el pacto con Tokio parecía inminente, las negociaciones se atascaron por cuestiones relativas al tratamiento del Stilton, el conocido como “rey de los quesos ingleses”. Y es que, aunque Londres venda ahora que el acuerdo se ha conseguido cerrar “en tiempo récord”, no ha estado exento de dificultades.

De manera paralela, Londres también está negociando ahora con otros países, incluido Nueva Zelanda, Australia y los Estados Unidos. Inicialmente, una de las estrategias de Downing Street fue la de presionar a Bruselas asegurando que las conversaciones con Washington cada día iban mejor. Pero con las presidenciales de noviembre, Donald Trump, ha cambiado su lista de prioridades, por lo que no se han notificado adelantos.