Asesor del expresidente

El yerno de Trump, Jared Kushner, nominado al Nobel de la Paz

Ha sido propuesto para recibir el galardón por su papel en los acuerdos entre Israel y naciones árabes

Jared Kushner el pasado mes de octubre
Jared Kushner el pasado mes de octubreJONATHAN ERNSTREUTERS

En estos días de agria batalla partidista ha provocado gran expectación la doble candidatura al Nobel de la Paz de Jared Kushner, ex asesor de Donald Trump para Oriente Medio y, claro está, marido de su hija Ivanka, y de Stacey Adams, la senadora demócrata responsable del histórico triunfo de su partido en las legislativas de Georgia.

Kushner es, por supuesto, el gran arquitecto de los mejores frutos de la política internacional abanderada por su suegro, verbigracia los históricos acuerdos suscritos entre Israel y varias naciones árabes, incluidas Marruecos y Emiratos Árabes Unidos, con las que enterraba décadas de mutua animadversión y establecía relaciones diplomáticas plenas.

Su candidatura se complementa con la de su colaborador más cercano, el enviado especial Avi Berkowitz, jovencísimo abogado, y mano derecha de Kushner, que jugó un papel clave en las delicadas negociaciones de Israel con los países citados y también con Baréin y Marruecos. Su jefe no logró sellar la ansiada paz entre Israel y Palestina, pero de las cenizas del enésimo acuerdo territorial y diplomático fracasado nació la oportunidad histórica de cambiar el equilibrio en la región.

Los pactos entre Israel y varios países teóricamente enemigos han descolocado a los enemigos tradicionales del aliado occidental, único baluarte de la democracia liberal en un Oriente Próximo rico en satrapías de todo pelaje. En cuanto a Abrams, su labor en los últimos años fue revolucionaria, contribuyendo a que los demócratas ganasen tanto las elecciones presidenciales como los dos escaños al Senado claves para decidir el futuro de la Cámara Alta.

Todo esto en un estado, Georgia, históricamente central para la Confederación sudista, y donde también comenzaron su labor ecuménica y política el reverendo Martin Luther King Jr. y muchos de los otros religiosos implicados en la lucha por los derechos civiles. Quién se sorprenda de estas candidaturas, o de la del propio Trump, que también está nominado, haría bien en recordar que Barack Obama fue galardonado con el Nobel de la Paz en octubre de 2009, cuando apenas llevaba 10 meses en la Casa Blanca.

Otros tres presidentes, Theodore Roosevelt, Woodrow Wilson y Jimmy Carter, fueron previamente acreedores del premio.