Condenado

Cadena perpetua para el hermano del presidente de Honduras

Una corte de Nueva York declaró culpable a «Tony» Hernández en 2019 de transportar droga a EE UU, tenencia ilegal de armas y falso testimonio

Un grupo de personas celebró la condena de Tony Hernadez en la Corte Federal de Nueva York
Un grupo de personas celebró la condena de Tony Hernadez en la Corte Federal de Nueva YorkPeter FoleyEFE

La fiscal de Manhattan, Audrey Strauss, se mostró satisfecha de la condena a prisión de por vida más 30 años contra el ex congresista hondureño, Juan Antonio Hernández, es decir, el hermano del actual presidente de Honduras, por transportar droga a EE UU, tenencia ilegal de armas y falso testimonio. Una corte de Nueva York declaró culpable a «Tony» Hernández en 2019. Faltaba conocer la pena que se le imponía. La lectura fue pospuesta en varias ocasiones a petición de la defensa del ex diputado hondureño de 42 años. Su hermano mayor y presidente, Juan Orlando Hernández, ha sido calificado por la Justicia estadounidense como «co-conspirador».

El mandatario defendió la inocencia de su hermano y acusó a la Administración para el Control de Drogas (DEA) de faltar a la verdad: «Para toda la familia, la noticia que se espera de Nueva York será dolorosa. ¿Y qué más se puede decir de un juicio en el que el testimonio del principal «cooperador» de los fiscales queda ahora expuesto por las grabaciones secretas de la propia DEA como una mentira?». El mandatario conservador sostiene que existe un registro público de la DEA con entrevistas a varios narcos que desligan a él y a su pariente de las actividades ilícitas.

La corte federal de Manhattan apunta al presidente hondureño en otra causa. Varios testigos han señalado vínculos del presidente con el narcotráfico durante el juicio contra el capo Giovanny Fuentes. La Justicia estadounidense sostiene que el hermano menor del presidente de Honduras «estuvo involucrado en todas las etapas del tráfico de varias toneladas de cocaína a través de Honduras con destino a EE UU». La sentencia ordena confiscar 138,5 millones de dólares de su patrimonio producto de sus negocios de venta de drogas.