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¿Qué mandatarios han renunciado a su salario público?

El primer ministro de Italia, Mario Draghi, ha renunciado al sueldo que le corresponde por ejercer el cargo

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El primer ministro de Italia, Mario Draghi, ha renunciado al sueldo que le corresponde por ejercer el cargo, de unos 110.000 euros brutos al año, según se supo ayer. El ex gobernador del Banco Central Europeo (BCE) fue designado por el jefe del Estado, Sergio Mattarella, para gobernar Italia tras la dimisión el 26 de enero del anterior primer ministro, Giuseppe Contecon la tarea fundamental de gestionar la pandemia. El sueldo que corresponde a un primer ministro “no parlamentario”, es decir, sin escaño, como es el caso del economista, asciende a los 110.000 euros brutos anuales. Su predecesor Conte, igualmente sin acta de parlamentario, lo redujo al 80% y cobraba 88.353 euros.

No es el único mandatario que ha decidido renunciar a su salario o reducirlo. El presidente electo de Ecuador, Guillermo Lasso, prometió que donará su sueldo a una organización social y renunciará a su pensión vitalicia como expresidente una vez que desocupe el cargo. La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, renunció en abril a percibir su sueldo por el cargo que ocupa. Debería percibir por ejercer dicha función 315.591,65 pesos (unos 2.770 euros), pero renunció a él cuando fue ratificado que se le restituye la asignación mensual vitalicia que le corresponde como expresidenta del país. El exvicepresidente del Ecuador (2018–2020) Otto Sonnenholzner, renunció en en su carta de dimisión  a cualquier pensión vitalicia por haber ocupado el cargo de vicepresidente. En diciembre de 2019, el presidente francés, Emmanuel Macronanunciaba su intención de renunciar a la pensión vitalicia que le corresponde cuando deje de ser presidente, unos 6.220 euros brutos al mes. 

Ejemplo durante la pandemia

Durante la pandemia, los políticos de varios países decidieron donar sus sueldos. Los miembros del Gobierno federal austríaco donaron como “señal de unión” un salario neto mensual para organizaciones benéficas. Una medida similar se tomó en Bulgaria. Todos los diputados, ministros y miembros de gabinetes políticos donaron su salario neto (al 100%) al sistema sanitario.

En Uruguay, el presidente Luis Lacalle Pou se descontó un 20% de su salario. Y la primera ministra de Nueva Zelanda Jacinda Ardern, decidió en abril de 2020 reducirse el sueldo de un 20% durante los siguientes seis meses.

El presidente más pobre

Años antes, Donald Trump anunció en 2016 que renunciaba a su salario como presidente de Estados Unidos, de unos 400.000 dólares al año y aseguró que recibiría el salario simbólico de un dólar al año mientras ocupara la Casa Blanca.

José Mujica, presidente de Uruguay hasta 2015, fue calificado como el presidente más pobre del mundo al renunciar al 90% de su salario mensual, unos 10.000 dólares. Conducía un viejo Volkswagen escarabajo y eligió vivir en una vieja casa de campo en lugar de en la residencia presidencial. En ese mismo año, la entonces presidente de Brasil, Dilma Rousseff, ordenó recortes masivos a empleados del gobierno y una reducción del 10% de su propio salario. Evo Morales, redujo su salario a alrededor de 1.300 dólares al mes cuando asumió la presidencia de Bolivia en 2005.