Milagro en China

La increíble historia del niño secuestrado que encontró a su familia gracias a los mapas que dibujaba

Tenía sólo 4 años cuando fue capturado, pero nunca olvidó su pueblo natal. 33 años después se ha reunido con su madre

Li Jingwei holds a map he drew from memory of his childhood village as he poses for a photo in Lankao in central China's Henan Province, Wednesday, Jan. 5, 2022. Abducted by child traffickers when he was 4 years old, Li was able to find his mother decades later after a meticulous drawing of his village landscape helped police locate his family. (Li Jingwei via AP)
Li Jingwei holds a map he drew from memory of his childhood village as he poses for a photo in Lankao in central China's Henan Province, Wednesday, Jan. 5, 2022. Abducted by child traffickers when he was 4 years old, Li was able to find his mother decades later after a meticulous drawing of his village landscape helped police locate his family. (Li Jingwei via AP)larazonAgencia AP

Un hombre de China que fue secuestrado a los cuatro años por una banda de traficantes de niños, se ha reunido con su familia tras compartir un mapa de su pueblo natal dibujado de memoria 33 años después.

Li Jingwei tenía sólo 4 años cuando fue capturado en 1988 por un hombre conocido en el pueblo de su estirpe, en la provincia suroccidental de Yunnan. Se lo llevaron a vivir con otra familia en la provincia central de Henan, donde creció en medio de incontables noches de añoranza y nostalgia.

Tras ser secuestrado en 1989, fue entregado a una familia en Lankao. Casi de inmediato, comenzó a hacer dibujos en el suelo con un palo, lo que le ayudó a recordar su lugar de nacimiento.

Ya de pequeño, se dio cuenta de que se lo habían llevado lejos de casa, pero no tenía forma de regresar ni siquiera cuando creció. No recordaba su nombre de nacimiento, el de sus padres ni el de su aldea.

Un mapa que Li Jingwei dibujó de memoria de su pueblo de la infancia se muestra en Lankao, en la provincia central china de Henan
Un mapa que Li Jingwei dibujó de memoria de su pueblo de la infancia se muestra en Lankao, en la provincia central china de HenanlarazonAgencia AP

Pero sí recordaba cómo era su pueblo natal: donde crecían los árboles, pastaban las vacas, contorneaban las carreteras y fluían los ríos. Revivía los arrozales y los estanques cercanos a su casa, y donde crecían los brotes de bambú. De niño, cuando echaba de menos su casa o estaba triste, dibujaba su pueblo, y llegó a hacerlo al menos una vez al día.

Animado por las noticias de otros niños secuestrados que se reunieron con sus familias, publicó el 15 de diciembre un vídeo en el que buscaba a la suya en una plataforma de intercambio de archivos, donde mostraba un mapa con el paisaje de su pueblo que había dibujado basándose en su memoria.

Pensaba que tardaría varios años en encontrarlos, pero para su sorpresa, poco después recibió pistas sobre su madre. Siguiendo las indicaciones, la Policía la encontró en Zhoukou, provincia de Henan, donde vive ahora, y confirmó su identidad mediante una prueba de ADN.

El emotivo reencuentro entre Li Jingwei y su madre en Lankao
El emotivo reencuentro entre Li Jingwei y su madre en LankaolarazonAgencia AP

El secuestro de niños lleva mucho tiempo proliferando en China, un problema que, según los expertos, se vio agravado por la antigua política de un solo hijo entre 1980 y 2015, y que se ha relajado en los últimos años. Durante décadas, quienes tenían un segundo vástago recibían importantes multas o se les obligaba a abortar.

Secuestro de varones

Muchas familias -especialmente las de las zonas rurales- consideraban tradicionalmente que los varones eran más capaces de mantener y continuar la línea familiar. Esta demanda impulsó un mercado negro de bebés varones y empujó a muchos a dar en adopción a las niñas.

En los últimos años, la tecnología, las redes sociales y los departamentos de policía dedicados a este asunto han ayudado a varios secuestrados ya adultos a reunirse con sus familias biológicas. Un caso destacado fue el de Guo Xinzhen, que fue secuestrado cuando tenía dos años por una mujer en la provincia de Shandong, al este de China, en 1997. Su padre, Guo Gangtang, nunca perdió la esperanza de encontrarlo y la búsqueda de la familia por todo el país inspiró una película en 2015.

De enero a noviembre, los organismos de seguridad pública de Chinaresolvieron más de 290 casos de secuestro de niños, y encontraron a 8.307 niños en el marco de una campaña de localización de desaparecidos que se puso en marcha a principios de 2021, según el Ministerio de Seguridad Pública.