Colombia
El chapucero asesinato del “peluquero de los famosos” a manos de su hermano: todo por la herencia
El hermano del famoso estilista colombiano confesó que le mató tras verse acorralado por la cantidad de pistas que dejó durante el crimen, en el que también asesinó a su madre
A finales de noviembre del año pasado,Mauricio Lealapareció muerto sobre una cama de una lujosa casa de La Calera, a las afueras de Bogotá, junto al cuerpo sin vida de su madre. No era una persona cualquiera. Leal era el peluquero de múltiples estrellas colombianas, alguien muy conocido en el mundo del espectáculo y estaba a punto de firmar colaboraciones con la organización de Miss Universo y Victoria Secret. El hallazgo de su cadáver y las sospechas de matricidio generó un gran escándalo en el país, cuya policía se ha volcado en la investigación del caso.
Junto a los dos cuerpos apareció una misteriosa nota que decía: “Los amo. Perdónenme, no aguanto más. A mis sobrinos y hermanos dejo todo. Con todo mi amor, perdóname, mamá”. Los investigadores pensaron que se trataba de un matricidio. El peluquero habría asesinado a su madre y después de habría quitado la vida. Pero no fue así. La confesión de una tercera persona ha desvelado quién fue el autor del atroz crimen.
Se trata del hermano del peluquero, Jhnoier, quien ha confesado ser el autor del doble asesinato. Gracias a su testimonio se ha confirmado que el estilista, herido y bajo el efecto de unas pastillas tranquilizantes, fue obligado por su hermano a escribir dicho mensaje, todo dentro de la trama para hacer parecer que era un suicidio, aunque no encajara por las cuchilladas, poco habituales en un suicidio.
En los asesinatos, de acuerdo al relato, hubo cuchillazos, golpes, amenazas y hasta un amplio intento por no dejar huellas de nada, relata El Colombiano. Usó incluso guantes para que no lo pudieran identificar. Sin embargo, algunas contradicciones como su herida en la mano, los análisis técnicos y los testimonios señalan a Jhonier como el autor de los hechos.
Al aceptar los cargos, Jhonier Leal quiere ahora una rebaja de pena en su condena de cerca de 43 años. El autor confeso del crimen pidió perdón a la familia en su declaración, y también a todos los colombianos, que sufrieron un shock al conocer la noticia de la muerte del famoso estilista en noviembre pasado.
Mauricio Leal tenía 47 años. Había tenido una infancia complicada en la ciudad de Cali y en la actualidad era dueño de un gran patrimonio. “He tomado la decisión, de manera libre y voluntaria, de aceptar los cargos a través de un acuerdo con la Fiscalía y aprovecho la oportunidad para hacer mi manifestación de arrepentimiento pidiendo perdón antes que nada a mi familia”, decía ante una jueza de Bogotá el hermano este martes.
Todo apunta a que Jhonier quería quedarse con la herencia de su hermano, fortuna que a su vez las autoridades investigan si fue legítimamente ganada por el peluquero o si, al contrario, está vinculada con lavado de activos.
De hecho, la Fiscalía se incautó, con fines de extinción de dominio, de dos propiedades y dos sociedades que estaban a nombre de Mauricio y cuya sucesión ya había iniciado el ahora señalado asesino. Esos bienes sumarían alrededor de 5.000 millones de pesos (poco más de 1,2 millones de dólares).
Pese a que desde el comienzo Jhonier Rodolfo Leal Hernández se había declarado ajeno a los asesinatos, la Fiscalía reconstruyó lo ocurrido y el acusado no tuvo otra opción que confesar hoy en la audiencia.
Al contrario de Mauricio, Jhonier no tuvo suerte en los negocios que emprendió, mientras que a los salones de estética de Mauricio de Bogotá iban reinas de belleza, cantantes y otras figuras del espectáculo.
NO HAY CRIMEN PERFECTO
El parricida y fratricida fue detenido en Bogotá por las autoridades en medio de un espectacular operativo, mientras que la gente no perdía detalle del caso. Los expertos coincidían en que Jhonier era el principal sospechoso del doble crimen pues en las entrevistas que dio a medios locales se contradecía y no daba muestras de sufrimiento por la doble muerte.
Una de las cosas que más llamó la atención es que dijo que una herida que tenía en la mano se la había hecho con unas tijeras y, en otra, cambió su versión al decir que se la había hecho con una pared rugosa.
En las audiencias el fiscal del caso dijo que el confeso asesino, que vivía en la misma casa de sus víctimas, primero mató a su propia madre en la habitación en la que dormía y luego fue a la de Mauricio al que hirió. Al parecer el arma se partió y tuvo que ir a la cocina a por otro cuchillo.
En su escrito, la Fiscalía dice: “Con el mismo cuchillo que atacó a la madre ataca al hermano, con la mala fortuna que ese cuchillo se quedó incrustada la hoja en el cuerpo de Mauricio”. Este incidente lo llevó a buscar otra arma blanca para seguir atacando a su hermano, amenazándolo para que escribiera la carta en la que pedía perdón por lo que había hecho y dejara clara instrucción que todo quedaba para sus hermanos y sobrinos.
Una vez muertos, movió los cuerpos a una sola habitación para lo cual utilizó guantes para no dejar huellas. A todo lo anterior se suma que ninguna puerta o ventana de la casa en donde ocurrió el crimen fue forzada y que las cámaras de seguridad dejaron ver que a la propiedad no entró ningún desconocido.
El fiscal le insistió varias veces a Jhonier que no “había crimen perfecto” pese a que planeó el asesinato de su hermano, que comenzó aseando peluquerías pero que luego montó su propio negocio en Bogotá.
Al aceptar los cargos de homicidio agravado por el parentesco, por estado de indefensión y sevicia, y ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio Jhonier podría ser condenado a una pena entre 45 y 50 años de prisión, pero recibiría una rebaja de la pena de hasta la mitad de la condena.
✕
Accede a tu cuenta para comentar