Asia

El accidente del avión que se estrelló en China con 132 personas pudo ser intencionado

The Wall Street Journal afirma que el análisis de las cajas negras sugiere que alguien “empujó” al avión a un descenso muy vertical que acabó en tragedia

Operarios trabajan en el lugar del accidente de un avión chino en un accidente en Guangxi este año en el que murieron 132 personas
Operarios trabajan en el lugar del accidente de un avión chino en un accidente en Guangxi este año en el que murieron 132 personasLu BoanAgencia AP

Nuevas especulaciones apuntan a que el misterioso accidente del vuelo MU5735 de China Eastern no fue una casualidad, sino que pudo ser el resultado de una acción intencionada por parte de la tripulación, de un individuo o de un tercero, provocando con ello la caída en picado de la aeronave.

El diario The Wall Street Journal informó a primera hora del martes que los datos de vuelo de una de las cajas negras del Boeing 737-800 indicaban que alguien en la cabina de mando estrelló intencionalmente el avión, citando a personas familiarizadas con la evaluación preliminar de los funcionarios estadounidenses.

Según ese medio, el aparato hizo lo que se le “pidió”, “desde navegar a gran altura hasta descender repentinamente casi en vertical a la velocidad del sonido para estrellarse y pulverizarse en casi 50.000 pedazos”.

Por su parte, la Administración de Aviación Civil de China (CAAC) no comentó el contenido de las revelaciones del WSJ. Pero si lo hizo el rotativo Global Times, afiliado al partido y utilizado a menudo como portavoz, que informó de que “no se ha facilitado a los medios de comunicación ninguna información relevante de la investigación”, citando a personas implicadas en el análisis de la CAAC junto con la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB) de Estados Unidos.

La noticia china enfatizó que “los investigadores estadounidenses implicados” en la reconstrucción han “cooperado con las autoridades locales en estricta conformidad con los requisitos marco del Anexo 13 del Convenio sobre Aviación Civil Internacional”.

En un momento en el que las relaciones entre Washington y Pekín están de lo más frágiles, el estudio del peor desastre aéreo de China en casi tres décadas -el accidente de un avión de fabricación estadounidense gestionado por una aerolínea estatal china- ha convertido puntualmente a los dos archirrivales en socios de conveniencia.

En la actualidad, el Departamento de Investigación de Accidentes de Vuelo de la CACC está “llevando a cabo una identificación, clasificación e inspección exhaustiva de los restos”, junto con el análisis de los datos de vuelo, la verificación experimental y otros trabajos relacionados de acuerdo con los procedimientos de investigación.

El Boeing 737-800, que se dirigía de Kunming a Guangzhou, se estrelló el 21 de marzo en las montañas de la región de Guangxi, tras una caída repentina desde la altitud de crucero, lo que provocó la muerte de las 132 personas que iban a bordo. Las circunstancias del accidente han sido confusas desde el principio. No hubo indicios de problemas técnicos y tampoco se hizo una llamada de emergencia.

Hasta ahora, los funcionarios estadounidenses que participan en las pesquisas han estado analizando entre otras las acciones de la tripulación técnica. No obstante, también existe la posibilidad de que otra persona del avión haya entrado en la cabina y haya provocado la catástrofe.

Algunos medios de comunicación han reivindicado que el piloto, Zhang Zhengping, dejó una nota de suicidio en la que acusaba a los dirigentes de China Eastern de “exprimir” a los empleados y al Gobierno chino de crear una “burbuja” en la economía. Las reivindicaciones también sugieren que Zhengping invirtió en el gigante inmobiliario China Evergrande y que todos sus ahorros se esfumaron cuando la empresa empezó a tener graves problemas de endeudamiento.

Tras las especulaciones iniciales sobre la causa del percance, la compañía aérea subrayó que el estado de salud, las circunstancias familiares y el estado financiero de los tres pilotos eran los idóneos.