El eurodiputado belga Marc Tarabella fue arrestado este viernes por la policía federal en relación con la trama de sobornos bautizada como "Qatargate" para ser interrogado por el juez instructor Michael Claise. Según confirmó la Fiscalía, la Policía belga ha encontrado y abierto una caja fuerte propiedad de Tarabella en un banco de Lieja y también fueron registradas dependencias del Ayuntamiento de Anthisnes, localidad de la que el arrestado sigue siendo alcalde.

La semana pasada el Parlamento Europeo levantó su inmunidad aparejada a su condición de eurodiputado y también la del italiano Andrea Cozzolino. La Fiscalía confirmó hoy que el apartamento de Cozzolino en el barrio bruselense de Ixelles también fue registrado. Se espera que en las próximas horas se conozca si el eurodiputado belga permanece o no encarcelado.

Tarabella siempre ha defendido su inocencia e incluso votó a favor del levantamiento de inmunidad. Su abogado también escribió una carta la semana pasada a la Fiscalía para ofrecerse a ser interrogado. Los investigadores se han incautado de un total de un millón y medio de euros en efectivo en una red que abarca a la ex vicepresidenta de la Eurocámara, Eva Kaili; su pareja, Francesco Giorgi, y el cerebro de la trama, el exeurodiputado italiano Antonio Panzeri.

Todos los sospechosos encarcelados están acusados de corrupción, blanqueo de capitales y pertenencia a asociación criminal con el objetivo de blanquear la imagen de Qatar y Marruecos. El pasado 17 de enero, Panzeri firmó un acuerdo de cooperación con la justicia belga por el que se comprometió a colaborar en el esclarecimiento de los hechos a cambio de una reducción de su condena (tan sólo un año de un total de cinco) y apuntó directamente a Tarabella.

El domicilio del eurodiputado belga ya fue registrado por la Policía el pasado 11 de diciembre, un día después de que se produjeran los arrestos de los principales implicados esta trama.

En esos momentos, los agentes no encontraron las suficientes evidencias para proceder a la detención, ya que para arrestar a un eurodiputado es necesario que este sea sorprendido en flagrante delito. A diferencia de los otros inculpados en la trama, en la casa de Tarabella no se encontró dinero en efectivo, aunque sí material informático que fue incautado para su análisis.